Como os dije la semana pasada hoy haremos un tutorial básico de cómo decorar galletas con glasa, espero poder ayudaros a empezar por lo menos con lo más básico si es que como a mí os gusta decorar galletas. Además si queréis podéis visitar mí receta de las galletas perfectas para ello.
Y dicho esto, lo más importante es tener tiempo, es un tarea muy, pero que muy entretenida, aunque no lo parezca, ya que se necesita su tiempo para adornar y su tiempo de secado si queremos dar más de una capa, y ahí nos surge el primer problema, porque se necesita una fuente de calor seco para secar el exceso de humedad de la glasa, sobre todo es importante para estabilizar los colores, porque, si no, corremos el riesgo de que según se vayan secando pierdan el color satinado tan bonito que tienen al principio, para ello se pueden utilizar varios métodos.
El primero sería el horno a mínima potencia y con la puerta entreabierta, este método es el que se tiene más a mano en todas las casas, pero no es el mejor.
Otro sería utilizar un deshidratador de alimentos, es el que suelen utilizar los profesionales, aunque como los hay de todos los precios hay que saber cual comprar y el lío está armado.
El que utilizo yo y me da muy buenos resultados es una decapadora, sí aunque suene mal, porque al ser calor seco lo que da es perfecto para ello, y de momento es el que seguiré utilizando.
Pero bueno, no os voy a engañar, hay que practicar mucho para que salgan presentables, ya que el saber las texturas del glaseado es el otro problema importante, porque tendremos que preparar varias diferentes dependiendo de la decoración que hayamos decidido hacer y aunque parezca fácil no lo es, pero intentaré explicarlo lo mejor que sepa.
Ya veis que me repito con lo que aunque parezca fácil no lo es, porque es verdad, tiene que ser una tarea que te guste, ya que se van muchas horas en todo el proceso, y luego todo tú trabajo es efímero, ya que las galletas desaparecen como por encantó jajajajaja….
Como preparar el glaseado:
Una vez que se tengan la galletas bien frías empezamos a preparar el glaseado.
Preparar el azúcar glass, yo lo hago casero.
Otro ingrediente que se necesita es cremor tártaro, nos servira para estabilizar la clara, se encuentra en tiendas especializadas, pero ¿conocéis los sobres que hay de gasificante? No levadura, si no, gasificante, vienen dos sobrecitos separados, pues bien, uno de ellos es cremor, así que ese es el que se puede utilizar.
Echar la clara en un bol y con varillas batir hasta que empiece a espumar.
Ir echando el azúcar glas tamizado las gotas de limón y el cremor y seguir montando.
Ir echando azúcar hasta que quede muy espeso, ésta será la base que después utilizaremos para preparar las distintas texturas.
Tutorial para las diferentes texturas:
1ª Consistencia suave: Utilizaremos 2 cucharadas base y 1 cucharadita de agua, esta textura sirve para el relleno simple, o sea, para cubrir toda la galleta.
2ª Consistencia media: 3 cucharadas base y 1 cucharadita de agua, esta sirve para que una forma se mantenga en su sitio sin que se mueva.
3ª Consistenca fuerte: 4 cucharadas base y 1 cucharadita de agua. Es un poco mas fuerte que la anterior y sirve para hacer formas más concretas por ejemplo adornos una vez seca la primera capa.
4ª Consistencia Muy fuerte: 6 cucharadas base y cucharadita de agua. Ésta es la que se utiliza para hacer por ejemplo flores, u otras formas que requieran que se mantengan firmes hasta que se seque.
Cuando tengamos las consistencias listas es el momento de teñirlas para ello se utilizan colorantes en gel especiales.
Nos ponemos manos a la obra.
Se pueden utilizar bolsas de usar y tirar con o sin boquilla, yo os aconseño que al principio las utilicéis con boquillas lo controlaréis mejor, deben ser con el agujero lo más fino posible, también se pueden utilizar biberones, aunque a mi me gustan menos, se desperdicia mucha glasa.
Llenar las bolsas y cerrar o bien con un nudo o con una pinza para evitar que la glasa se nos salga.
Hay que tener claro el diseño que queremos hacer, podéis probar en una galleta primero.
Con la consistencia suave bordear el contorno que queráis pero cubrir, y seguido rellenar por completo el interior, la capa debe ser generosa.
Esto será la base para cuando esté seca hacer los adornos que más nos gusten.
Como secar la glasa:
Como os dije al principio yo utilizo una decapadora, pero si estáis empezando hasta que controleis las dejáis secar a temperatura ambiente, dependerá de la humedad que haya en el ambiente tardará más o menos horas, pero por lo menos 3/4 debéis dejarlo secar.
Cuando esté seca la primera capa base podéis hacer los adornos que más os gusten y de los colores que querais.
Aquí sería muy complejo enseñados las diferentes técnicas que existen para la decoración, pero este pequeño tutorial es para iniciarse en ello.
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