Hoy me levanto tempranito también que como es época de comuniones y bodas y tenemos muchos encargos que preparar, toca currar (de nuevo) así que me vais a perdonar que no os ponga una de las recetas que os puse por facebook pero es que no tengo ni un huequito para prepararlas.
He aprovechado que tenía una galleta de uno de los pedidos para haceros este tutorial. Lo primero decir que la galleta la descarté porque hice de más y esta no me gustó como quedo, vamos, que ya sé que la galleta no está perfectamente planita pero me vale para enseñaros lo que quiero que veáis.
Lo primero, preparar lo que vamos a necesitar:
Cortador de galleta con forma de cáliz
Rodillo pequeño
Fondant blanco
Colorante en polvo dorado
Alcohol para diluir el colorante en polvo, yo uso vodka
Colorante en spray dorado
Pincel pequeño
Cortado de galletas redondo
Crisco (Manteca vegetal sin olor, sabor o color)
Manga con glasa de consistencia media
Con anterioridad habremos hecho nuestras galletas usando el cortador de cáliz. Ya sabéis que para empezar a decorar deben estar bien frías.
Estiramos el fondant usando el rodillo, ya sabéis que si se os pega a la mesa podéis poner un poco de Crisco. El grosor del fondant, ni muy fino ni muy gordo, unos 2mm. Si lo hacemos muy finito se nos notarán las imperfecciones de la galleta y si es muy gordo la galleta será muy pesada de comer. Cortamos el fondant con el mismo cortador que hemos usado para la galleta.
Y lo pegamos a la galleta. Para pegarlo yo uso el Crisco pero podéis usar otras cosas como el pegamento comestible, glasa....
Una vez que tenemos todas nuestras galletas preparadas con el fondant las ponemos todas juntas pegaditas unas a otras y les pasamos el spray dorado. El spray debe usarse a unos 20cm más o menos. Lo bueno de poner todas las galletas juntas es que vamos a terminar en un momento y a desaprovechar poco producto. Podemos pintar cada galleta a mano con el colorante en polvo pero vamos a tardar muuuuuucho más y si tenemos que preparar 50, 100 galletas... esto es muy rápido.
Volvemos a estender el fondat y con el cortador de círculos vamos cortando círculos del tamaño de la hostia y las colocamos directamente en la galleta. Como el spray está recién puesto se pega bien, si ya se os ha secado pasar el pincel húmedo y listo.
Ahora cogemos la manga, yo le he puesto glasa amarilla pero podéis usar blanca. También he usado una boquilla del 2 de Wilton pero podéis variar el tamaño dependiendo del tamaño que queráis para el adorno. Vamos a hacer una cruz en la hostia, para ello hacemos 4 gotas, empezamos con la de arriba, ponemos la manga a 90º apretamos hasta que se forme tan ancha como queramos y luego vamos avanzando lentamente hacia abajo.
Repetimos con cada uno de los lados haciendo la de abajo más larga.
En el último paso vamos a pintar la glasa pero es importante dejarla secar antes, si no puede ser por completo al menos la capa exterior.
Una vez seca diluimos el colorante dorado en el alcohol, que no esté muy líquido, y pintamos la cruz con el pincel. Si la glasa no está seca del todo, solo la parte exterior, tened cuidado al presionar. Si no tenéis el colorante en polvo dorado un truco es echar el spray en el tapón al secarse se convertirá en polvo.
Dejamos secar y listo. Muy rápidas y si tenéis un pedido muy grande lucen mucho con poco trabajo por lo que son ideales para combinar con otras que requieran más trabajo.