INGREDIENTES:
1 kg de frambuesas
750 g de azúcar
1/4 manzana con piel, gelatina o pectina (a nosotras nos gusta la manzana)
Zumo de medio limónMODO DE HACERLO:
Lavamos las frambuesas, las escurrimos en un colador grande y las colocamos sobre papel absorbente con el agujero hacia abajo para que expulsen el agua.
Modo tradicional:
En una cazuela colocamos las frambuesas con el azúcar y la 1/4 manzana que es un espesante natural y lo ponemos a fuego medio removiendo de vez en cuando para que no se pegue.
Al cabo de unos 40 minutos añadimos el zumo de limón y dejamos cocer removiendo de vez en cuando.
Para saber cuando la mermelada está en su punto podemos hacer dos cosas, o bien ponemos un poco de mermelada en un plato frío, la dejamos enfriar y si al pasar el dedo por encima se forman arrugas, es que ya está.
O bien, otra manera de saberlo es echar dos porciones de mermelada en un plato, un poco separadas, si no se juntan es que ya está.
Cuando la mermelada tenga la consistencia deseada, la apartamos del fuego, quitamos la manzana y la trituramos con la batidora, a menos que nos guste con tropezones que en tal caso la dejaremos como está.
Cuando se enfríe ¡YA ESTÁ LISTA PARA COMER!!!!
Con la Thermomix:
Echamos en el vaso las frambuesas junto con el azúcar y programamos 45 minutos a 100º velocidad 2, sin el cubilete puesto y con el cestillo del revé para evitar salpicaduras.
Estaremos pendiente al principio por si sale espuma y rebosa, entonces apagamos un momento y luego encendemos.
Cuando queden 5 minutos para terminar incorporamos el zumo de limón.
Cuando esté hecha podemos triturarla unos segundos a velocidad 5.
Si no ha espesado lo suficiente podremos usar peptina en dosis según el fabricante o tres hojas de gelatina neutra que habremos tenido hidratando antes.
Vertemos en los recipientes donde vayamos a conservarla, dejamos enfriar y ¡¡YA ESTÁ LISTA PARA TOMAR!!
Esta mermelada la podemos conservar durante meses en botes de cristal (pinchar aquí) o bien la podemos congelar en táper.