Ingredientes:
1 porción de Provolone
1/2 berenjena
4-6 tomates secos hidratados en aceite de oliva
orégano fresco o seco
Preparación del provolone con berenjena y tomate seco:
La manera habitual o más conocida de preparar el provolone al horno es colocando en una cazuelita pequeña una base de salsa de tomate frito casera, colocar encima el provolone y hornearlo. Desde luego, que es una opción espectacular, donde mojar pan es obligatorio. Ahora bien, si quieres una alternativa y seguir optando por una versión sencilla, prueba a preparar el provolone con berenjena y tomate seco.
Para empezar, lavaremos y secaremos la berenjena. La cortaremos en láminas de medio centímetro de grosos. Aquí tenemos dos opciones y ambas igual de válidas, por lo que puedes decantarte por la que mejor te convenga en el momento. Haremos las rodajas de berenjena a la plancha o al horno, un par de minutos por cada lado o hasta que estén hechas.
Por otro lado, trocearemos el provolone en trozos del tamaño de una nuez o incluso un poco más grandes. Y en una cazuelita de barro o similar, iremos colocando trozos de provolone, con rodajas de berenjena a la plancha y de tomate seco.
Introduciremos la bandeja de provolone con berenjena y tomate seco en el horno precalentado a 200ºC aproximadamente, durante unos 5-10 minutos o hasta que veamos que el queso ya se ha fundido. Al retirar del horno, espolvorearemos un poco de orégano al gusto.
Nota: puedes acompañarlo con pan, picos de pan, tostadas o incluso puedes preparar tus propias tostadas de pan. Para ello solo tendrás que cortar rebanadas de pan de medio centímetro y colocarlas en la rejilla del horno, alrededor de la cazuelita del provolone. De esta manera aprovecharás la energía del horno y tendrás tostadas crujientes recién hechas.
Fuente: este post proviene de La despensa de una Foodie, donde puedes consultar el contenido original.
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