En mi versión, le he añadido también una berenjena aunque la receta original no la lleva. El shahshuka es un plato que recuerda mucho a un pisto por los ingredientes que lleva, por su sencillez y por la facilidad en su preparación. Un plato tradicional donde la gracia se la dan las especias que se le añaden.
Ingredientes (2 pax):
2 pimientos rojos
1 berenjena
1 cebolla
800 gr de tomates en conversa o tomates frescos muy maduros
2 dientes de ajo
1 cucharadita de comino molido
1 cucharadita de pimentón dulce
2-3 guindillas de Cayena (la receta original lleva Harissa, pero la Cayena sirve para dar el toque picante) – opcional
4 huevos
aceite de oliva virgen extra
sal
Preparación del Shakshuka:
Comenzaremos lavando los pimientos rojos y la berenjena. Cortaremos la berenjena en dados pequeños y el pimiento rojo en cuadraditos medianos. La cebolla la pelaremos y la picaremos también en cuadraditos medianos. En una sartén, freiremos la berenjena hasta que esté blanda. Cuando esté lista, la retiraremos y la reservaremos.A continuación, en esa misma sartén (que sea de fondo ancho, sino también se puede utilizar una cazuela) freiremos el pimiento rojo junto a la cebolla picada y los ajos picados, durante unos 15 minutos o hasta que el pimiento y la cebolla estén blandos.
Cuando el pimiento y la cebolla estén listos, incorporaremos de nuevo la berenjena, añadiremos el tomate triturado y dejaremos que se cocine durante unos 20 minutos. Pasado ese tiempo, añadiremos la sal, el comino molido, la guindilla y el pimentón dulce. Removemos bien y dejamos cocinarse unos minutos más. Probamos y rectificamos de sal si fuera necesario.
Nota: puedes tener preparado el shakshuka de víspera las verduras con las especias. En el momento de servirlo solo tendrás que calentarlo y añadir los huevos para que se cocinen.
Para terminar de preparar el shakshuka, en la misma sartén donde tenemos las verduras, haremos unos pequeños huecos donde cascaremos los huevos. Cocinamos a fuego lento con la sartén tapada durante unos 5 minutos. Con precaución de que no se cuaje la yema, el punto optimo es cuando la clara ya está blanca pero todavía tiene una parte cruda cerca de la yema. En ese punto, retiramos del fuego y lo dejamos tapado unos pocos minutos más.
Espero que os guste y que os animéis a probarlo