En Santiago tenemos una de las tartas más sencillas y sabrosas de Galicia, la tradicional tarta de almendra de Santiago.
Se trata de un dulce tan sencillo en su preparación como impresionante su resultado. Sólo con almendra, azúcar y huevos, con un pequeño aroma de limón por su piel, podemos conseguir un postre de lujo. Está claro que con estos ingredientes, la calidad de los mismos son lo que marcará la diferencia. Unos huevos de casa y una almendra Marcona recién molida, hará de esta tarta una delicia.
Esta tarta de almendra es, sin lugar a dudas, una de las señas de identidad de Santiago de Compostela y de Galicia. Cuenta con la Identificación Geográfica Protegida, I.G.P. Tarta de Santiago. Podemos encontrar este dulce en todas las pastelerías de la ciudad y siempre decorada con la tradicional Cruz de la Orden de Santiago.
Con esta tarta he tenido la oportunidad de dar el pistoletazo de salida a la aventura de una amiga bloguera, Vicky del Taller de azúcar. Se ha propuesto hacer El camino más dulce, el camino Mozárabe a Santiago de Compostela. Su idea es aprovechar cada etapa para aprender y descubrir algunas de las muchas recetas dulces que pueblan las cocinas tradicionales de nuestra geografía. Podéis seguir su proyecto y sus descubrimientos en su web.
Existen muchas formas de preparar esta tarta. El porcentaje mayor o menos de almendra hará que este dulce quede con una u otra textura y sabor. La receta que hoy os traigo está tomada de un libro de cocina tradicional gallega de principios del siglo XX, La Cocina Práctica, por Picadillo. Picadillo llama a esta tarta simplemente como tarta de almendra ya que no fue hasta mucho más tarde cuando se comenzó a llamar Tarta de Santiago.
En cualquier caso, se trata de una delicia tan sencilla como igual de valiosa, culinariamente hablando.
RACIONES: 10
DIFICULTAD: Baja
TIEMPO: 1 hora
TARTA DE ALMENDRA DE SANTIAGO:
375 g. ALMENDRA MOLIDA
375 g. AZÚCAR
7 HUEVOS
RALLADURA DE LIMÓN
1.- En un bol mezclamos los huevos con el azúcar. Batimos bien hasta que la mezcla comience a espumar.
2.- Añadimos la almendra molida y la ralladura de limón. Mezclamos bien.
3.- Engrasamos un molde con mantequilla. Forramos el molde, por lo menos en su base, con papel de horno. Esto hará que nos resulte mucho más sencillo el momento del desmoldado.
4.- Vertemos la crema de la tarta sobre el molde y, con el horno previamente caliente a 180ºC, horneamos la tarta de almendra durante unos 40 minutos. Este tiempo dependerá del tamaño y grosor de la tarta. Lo ideal es pincharla a partir de los 35 minutos para comprobar que el palito salga seco.
5.- Dejamos que la tarta se enfríe durante 15 minutos sobre una rejilla y la desmoldamos. Dejamos que repose sobre la rejilla hasta que se haya enfriado totalmente.
6.- Una vez que tenemos la tarta fría procedemos a su decoración.
Tradicionalmente se emplea la cruz de Santiago y se presenta espolvoreada de azúcar. Aunque en Santiago es posible encontrar moldes metálicos para poder hacer esta cruz, estoy segura de que no todos os vendréis a comprarlos. Esto no puede impedir que podamos decorar nuestra tarta de almendra como mandan los cánones. Imprimiendo una cruz del tamaño deseado, podremos utilizarla como plantilla para decorar nuestra tarta.+
Espolvoreamos la tarta con azúcar molido o con azúcar glass y servimos.
Fuente: este post proviene de Galletas para Matilde, donde puedes consultar el contenido original.
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