De lo que no hay duda es de que la imaginación al poder, y en cocina no podía ser menos, sobre todo en casa que es donde tenemos los comensales más exigentes. Intentando preparar un pastel distinto, un bizcocho para los desayunos que se saliera de lo habitual, pensé en esta receta, un bizcocho de toffee, bundt cake.
Después de preparar una tarta de caramelo y chocolate, me había quedado un poco de toffee sobrante, y como lo de tirar no va conmigo, pensando en como reciclarlo, voilá, un estupendo bizcocho para un regimiento de caramelo o toffee.
La receta es sencilla y los ingredientes los de siempre, con un toque a toffe nada empalagoso y que, en opinión de los que lo probaron: bastante bueno. En fin, vosotros me diréis qué os parece si os animáis a prepararlo.
RACIONES: 15
DIFICULTAD: baja
TIEMPO: 30 minutos + 50 minutos horno
BIZCOCHO DE TOFFEE, BUNDT CAKE:
370 gr. HARINA
2 cdita. LEVADURA QUÍMICA
1/2 cdita. BICARBONATO
1/2 cdita. SAL
225 gr. MANTEQUILLA EN POMADA
225 gr. AZÚCAR MORENO
250 ml. TOFFEE
4 HUEVOS
250 ml. LECHE ENTERA
ZUMO DE 1/2 LIMÓN
2 cdita. EXTRACTO VAINILLA
AZÚCAR GLASS PARA DECORAR
TOFFEE:
100 gr. AZÚCAR
10 gr: MANTEQUILLA
200 ml. NATA (crema de leche)
1 cda. AGUA
1.- Comenzamos preparando el toffee, para ello ponemos en un cazo el azúcar con una cucharada sopera de agua y calentamos hasta que se forme un caramelo color ámbar.
2.- Retiramos el cazo del fuego y añadimos la mitad de la nata (crema de leche). En este paso tenemos que ser muy cuidadosos y tener especial cuidado al verter la nata (crema de leche) ya que puede producir salpicaduras peligrosas por la alta temperatura que llega a alcanzar el caramelo.
3.- Volvemos a poner el cazo al fuego y añadimos la mantequilla. Mezclamos para integrar los ingredientes y dejamos cocer durante 1 o 2 minutos. Retiramos del fuego y dejamos que temple la mezcla antes añadirla a la masa del bizcocho.
4.- Preparamos un buttermilk casero añadiendo el zumo de limón a la leche. Lo dejamos reposar durante 15 minutos antes de utilizarlo. Veremos como la leche tendrá un aspecto de haberse cortado, con grumos.
5.- En un bol mezclamos la harina, levadura, bicarbonato y sal. Reservamos.
6.- En un bol grande batimos la mantequilla con el azúcar moreno. Es fundamental que la mantequilla esté bien blandita para poder realizar esta operación, si es necesario podemos derretirla ligeramente en el microondas durante 5 o 6 segundos.
7.- Añadimos el toffee a la mezcla y mezclamos bien. Incorporamos los huevos uno a uno, batiendo para incorporarlos de cada vez. Incorporamos la esencia de vainilla y el buttermilk y mezclamos.
8.- Añadimos la harina en dos veces mezclando en cada incorporación con unas varillas. No es necesario que batamos la crema, basta con conseguir que se integre.
9.- engrasamos con mantequilla un molde y lo enharinamos. Vertemos la mezcla del bizcocho y con unos golpecitos en el molde la asentamos para que quede uniforme y elimine posibles burbujas de aire. Horneamos con el horno previamente caliente a 175ªC, con calor arriba y abajo, durante 50 o 55 minutos. cuando pinchemos el bundt cake con un palito y este salga limpio, el bizcocho estará listo.
10.- Retiramos el pastel del horno y lo dejamos, dentro del molde, sobre una rejilla durante 15 minutos antes de proceder a desmoldarlo. Lo desmoldamos y lo dejamos sobre la misma rejilla hasta que se haya enfriado totalmente. Si desmoldáramos el bizcocho recién salido del horno este podría romperse, por eso es necesario dejarlo durante un rato dentro del mismo molde antes de retirárselo. Si esperamos mucho más de los 15 minutos antes de desmoldar el bizcocho corremos el riesgo de que se luego se desprenda con dificultad y pueda romperse.
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