Receta para hacer bizcocho jugoso
El título de esta receta lo dice todo; "bizcocho jugoso". Y es que este es, realmente, uno de los bizcochos más tiernos que he probado nunca, ¡y mira que habré probado recetas de bizcocho a lo largo de mi vida! La textura que se obtiene con la combinación de ingredientes usados para su elaboración no tiene nada que ver con la de otros bizcochos, como la del bizcocho clásico con yogur. Creo que lo que marca la gran diferencia entre esta y otras recetas es el uso de una buena cantidad de queso de untar. Se obtiene así un bizcocho con una miga muy jugosa que se mantiene en un magnífico estado durante varios días. El bizcocho que hice para esa foto duró cuatro días, el último pedacito, del que dio buena cuenta éste que escribe, estaba prácticamente igual de tierno que el primer día. Además de su textura, hay que destacar también el embriagador sabor a mora que le trasmite el licor, un sabor que se acentúa con el paso de las horas.
Este bizcocho puede ser consumido tal cual, o, como en el caso de otros bizcochos, puede ser usado como base para la elaboración de numerosas elaboraciones dulces, como puede ser un pastel de queso y frutos del bosque, o una riquísima tarta de zanahoria y coco. Si lo vais a usar como base para otros postres, os recomiendo que lo tengáis en cuenta a la hora de decidir si le añadís o no el licor de mora, o cualquier otro licor, ya que, si lo hacéis, con algunas preparaciones ligará bien, pero, en otras, igual el licor resta protagonismo a otros ingredientes.
Para aquellos de vosotros que nunca habéis hecho un bizcocho, porque pensáis que se necesita mucho tiempo y que no vale la pena el esfuerzo, quiero deciros que, como se puede ver en el paso a paso, esta receta es sumamente sencilla y rápida de hacer. Y, encima, el producto obtenido es mil veces superior a cualquier bizcocho que podáis comprar en un establecimiento.
Y dicho todo esto, os invito a sacar los cuencos e ingredientes porque ya va siendo hora de meternos en faena. ¡Vamos con la receta!Vídeo de la Receta
Ver más Vídeos
Ingredientes [Para 8 personas]:
Huevo - 4 unidades
Harina de trigo - 200 gramos
Azúcar - 200 gramos
Levadura química - 7 gramos
Licor de mora - 100 gramos
Sal - una pizca
Aceite de girasol - 80 ml
Queso de untar - 200 gramosElaboración de la Receta
Para comenzar a preparar este delicioso bizcocho, cogemos dos recipientes y separamos las claras de las yemas. Debemos llevar especial cuidado para que no caiga nada de yema en el recipiente de las claras, al contrario no pasa nada, es decir, que caiga algo de clara en el cuenco de las yemas no es significativo.
Añadimos el azúcar al cuenco donde tenemos las yemas. Batimos con una varilla de mano hasta formar una pasta cremosa.
Echamos en el cuenco el queso de untar y seguimos batiendo para que éste se integre en la crema.
A continuación, vertemos el aceite de girasol y el licor de mora. Mezclamos para que ambos ingredientes se repartan de manera uniforme.
En otro cuenco, tamizamos la harina y la levadura con la ayuda de un colador.
Vertemos, poco a poco, la harina y la levadura tamizadas al cuenco donde tenemos las yemas y el resto de ingredientes. A medida que añadimos harina, vamos mezclando con la varilla para que ésta se integre en la crema.
Precalentamos el horno a 180ºC.
Ahora ha llegado el momento de montar las claras a punto de nieve. Podemos hacerlo como se hacía antes de la llegada de la tecnología, es decir, con un tenedor, o, haciendo uso del accesorio de varilla de la batidora eléctrica. En el vídeo os muestro cuál es el punto en el que deben quedar. Si invertís con cuidado el recipiente en el que las habéis montado, éstas deben quedan adheridas al mismo sin caerse. Ojo, hacedlo con cuidado, porque si las claras no están totalmente montadas, y queda una pequeña fracción líquida, podéis acabar con ellas en el suelo de la cocina.
Engrasamos, con un poco de mantequilla, un molde para horno.
Por último, vertemos las claras montadas en el cuenco donde tenemos el resto de ingredientes y mezclamos con movimientos envolventes, con suavidad para que las claras que hemos montado no pierdan demasiado aire.
Vertemos la masa en el molde que hemos engrasado y metemos éste en el horno. Horneamos, a 180ºC, entre 45 y 60 minutos, o hasta que nuestro bizcocho esté cocido. Podemos comprobar el punto de cocción introduciendo un palillo en el centro del bizcocho, si éste no presenta restos de masa al ser retirado, el bizcocho está cocido.
Dejamos enfriar en el mismo molde.
Una vez frío, desmoldamos y servimos.
Anotaciones y Consejos
Para aromatizar este bizcocho hemos usado licor de moras, pero, si no tenéis, lo podéis sustituir por cualquier licor que sea de vuestro agrado; coñac, ron, whisky, etc.