Había llegado del trabajo. Tenía la casa por recoger, faena que hacer y mil cosas más, como seguro que os pasará también. Y es que por mucho que me hayan dicho y me digan que no deje las cosas para mañana....aysss, nunca lo hago.
Pero había algo que ya no podía esperar para mañana. Y era estrenar mi mini molde bundt cake que hace poco compré en Lidl y que quería salir a escena ya.
No sé qué tienen los moldes minis pero me vuelven loca. Me parecen monísimos. Tienen el tamaño perfecto para hacer tartas y bizcochos que, por suerte o por desgracia, no duran mucho en tu cocina.
Así tienes la excusa perfecta para pensar qué receta será la próxima ;)
Tu paladar y tus invitados te lo agradecerán (tus curvas no tanto) :D
Así que en un plis plas, nació este bundt cake, o bizcochocolate, como yo lo he llamado. No sé por qué aún no tenía publicado ningún bizcocho siguiendo la receta clásica que siempre me ha enseñado mi madre. Es la receta "1, 2, 3" que seguro conocéis.
Chocolateeeeeeeeeeeeeee!!!!
No pude resistir anoche en comerme un trocito después de cenar como postre. Qué buenoooo!
Tierno, esponjoso y nada empalagoso. Así que un trocito se convirtió en dos. Y luego dos y medio...y luego en tres!! No podía parar!!
Aquí os dejo la receta ;)
Ingredientes:
Bizcocho:
3 huevos
1 yogur natural azucarado
1 medida de yogur de aceite de girasol
2 medidas de yogur de azúcar
3 medidas de yogur de harina de espelta
1 cucharadita de esencia de vainilla
Canela molida
1 sobre de levadura
1 cucharada de chocolate en polvo Valor
1 poco de mantequilla para engrasar el molde
Cobertura:
1 sobre de chocolate de cobertura blanco y negro
Elaboración:Precalentamos el horno a 200º.
En un bol, echamos el yogur, y con el mismo vasito del yogur añadimos el aceite, el azúcar, la levadura, el cacao y la esencia de vainilla. Separamos las claras de las yemas, y añadimos las yemas al bol. Tamizamos la harina y vamos removiendo suavemente con la barilla. Espolvoreamos con canela molida. Por último, montamos las claras y las añadimos al bol, removiendo muy suavemente con movimientos envolventes para que coja aire.
Engrasamos el molde con un poco de mantequilla derretida. Vertemos la mezcla al molde y horneamos aproximadamente 25- 30 minutos. Comprobamos con un tenedor que esté hecho por dentro. Sacamos del horno y reservamos.
Cuando el bizcocho esté templado, calentamos en un cazo con agua el sobrecito del chocolate de cobertura, y cuando esté listo lo vertemos por encima. Dejamos enfriar.