Si te apetece comer algo dulce pero salado al mismo tiempo puedes hacer esta receta, son unos maravillosos bollitos de leche, de origen francés, son muy fáciles de hacer y nos vienen fenomenal en el desayuno, la merienda, y para rellenar con lo que más te guste. Puede ser dulce... pruébalos con nocilla, miel o mermelada... o con salado ¿que tal con mantequilla y jamón de york? o con un rico jamoncito serrano, queso, chorizo, salchichón... bueno, es que solo pensarlo se me hace la boca agua porque están fenomenal y además son muy sencillos de hacer, suelen quedar muy bien pero eso ya nos lo dirás cuando los prepares...
Bollitos de leche
Ingredientes
2 huevos
200 g de leche
75 g de azúcar
50 g de aceite de oliva
un chorrito de vainilla
30 g de levadura fresca
600 g de harina de fuerza
una pizca de sal
un huevo para pintar
Preparación de los bollitos de leche:
Disolver la levadura en la leche tibia y poner en un bol grande, añadir el aceite de oliva, los dos huevos, el azúcar y el chorro de vainilla, batir y añadir la harina poco a poco, cuando ya no podamos mezclar con las varillas, amasar con las manos y formar una bola.
Dejar crecer hasta que doble su volumen, después volver a amasar y extender con el rodillo; cortar los bollitos con un corta pastas redondo u ovalado, deben tener unos dos centímetros de grosor más o menos; si preferís podéis formar unas bolitas aplastándolas luego ligeramente
Hacer un par de cortecitos con un cuchillo afilado, dejar reposar hasta que doblen su volumen; después pintar con huevo batido y meter en el horno precalentado a 200º y hornear 10 o 12 minutos hasta que estén dorados por arriba.
Si lo haces con la thermomix porque la utilizas en la cocina para la repostería, poner en el vaso la leche tibia con la levadura a velocidad 2, ir añadiendo los demás ingredientes y batir dos minutos a velocidad 2, después añadir la harina y la sal amasando 15 o veinte segundos a velocidad 6. Sacar y amasar un poco dando forma de bola y seguir con el proceso anterior.
Recordad que los podéis comer con dulce, salado, solos... están riquísimos con café. Y otra forma deliciosa de preparar unos bollitos de pan es hacerlos rellenos, quedan como mini bocadillos y están buenísimos. Son ideales para merendar y para servir cuando tenemos invitados, van a gustar tanto a pequeños como a mayores.