Vale que yo soy muy de bizcochos, pero os puedo garantizar que este es brutal, el sabor es delicioso, nada de empalagoso, lo justo de dulce, lo justo de sabor a coco, húmedo por dentro, y con un glaseado de uhmmmmm.
Estaba deseando de hacerlo desde que lo vi, siempre me ha gustado la combinación piña y coco, y encima como lleva un pelín de ron, todavía lo hace mas especial.
De todas formas, si hay niños, no le pongáis el ron, que no es indispensable.
Necesitamos:
1 lata pequeña de leche condensada (300 gr.)
4 huevos
100 gr. de coco rallado
6 rodajas de piña en su jugo
35 ml. de ron (opcional)
1 sobre de levadura
100 ml. de aceite de girasol
160 gr. de harina
Para el glaseado:
200 gr. de azúcar glass
4 cucharadas del jugo de la piña en lata
Preparación:
Lo primero que haremos será pesar los ingredientes.
Ponemos el coco en la thermomix y trituramos en velocidad progresiva del 1 al 10, aunque ya está rallado lo queremos un poco mas fino.
Reservamos.
Sin lavar el vaso, ponemos las rodajas de piña y trituramos en velocidad 4 unos segundos.
Sacamos y reservamos.
Sin lavar el vaso, ponemos la mariposa y añadimos la leche condensada, ponemos la velocidad 2 y vamos echando los huevos uno a uno, si dejar de batir, añadimos el aceite y el ron, a continuación añadimos el coco y la piña, todo esto lo hacemos sin dejar de batir.
Por último añadimos la harina que previamente hemos mezclado con la levadura, a mi me gusta tamizarla, batimos unos segundos y terminamos de mezclar con una lengua de silicona, con movmientos envolventes.
Precalentamos el horno a 200º y engrasamos el molde elegido, yo he usado un nordic ware, y suelo usar spray especial.
Añadimos la masa al molde y metemos al horno, que bajaremos de temperatura, lo programamos 35 minutos 170/180º.
Una vez pasado el tiempo, pinchamos con un palito y vemos si sale seco y limpio, si no es así dejamos unos minutos mas.
Sacamos el molde del horno, dejamos enfriar 10 minutos dentro del molde, y desmoldamos dejando enfriar en una rejilla.
Para el glaseado, ponemos en un bol el azúcar y el jugo de la piña. y con ayuda de un batidor emulsionamos hasta tener una crema blanca, añadimos por encima al bizcocho y listo zampar!.