Ya es época de buñuelos, unos dulces de típicos de Semana Santa. Pero como estamos en cuaresma ya podemos encontrar estos buñuelos de anís en pastelerías y panaderías.
Los buñuelos los podemos encontrar de muchas maneras, los típicos de estas fechas son los buñuelos de viento, son los que suelen vender en panaderías. También podemos encontrar los buñuelos del Ampurdán, típicos de Cataluña que son en forma de roscos y están riquísimos. Luego están los rellenos que ahora los encontramos de todos los sabores, de nata (crema de leche), crema, chocolate, mermeladas...
Los buñuelos son muy sencillos de preparar, con ingredientes que tenemos en casa. Estos buñuelos de anís que hoy os propongo no son los de viento, quedan con una masa más consistente y esponjosa, están muy buenos. La cantidad que pongo es para unos 20 buñuelos, pero podéis hacer más masa y hacer unos poquitos y dejar la masa en la nevera y al día siguiente hacer mas, ya que los buñuelos están más buenos recién hechos.
Y si os gustan una vez hechos los podéis rellenar con una boquilla pequeña con la crema que os guste. También podéis prescindir del anís si no os gusta, se puede poner ralladura de naranja o de limón.
Seguro que los volveréis a hacer.
Ingredientes:
200 gr. de harina normal
1 huevo grande
60 gr. de azúcar
125 ml. de leche
25 gr. de mantequilla derretida
5 gr. levadura química
1copita de anís
Aceite para freír
Azúcar para rebozar los buñuelos.
Preparación:
Preparamos los buñuelos de anís. Coge un bol, añade el huevo, el azúcar, la leche y la mantequilla derretida, bate hasta mezclarlo bien.
Seguido añade el anís, mezclamos. Añade la harina junto con la levadura en tandas y mezclando bien. Nos quedará una masa como una crema. Dejamos reposar unos 15 minutos.
Pon una sartén con abundante aceite a calentar, cuando esté caliente sin que llegue a echar humo, con una cuchara coge porciones de masa y los vas echando. Iremos poniendo pequeñas porciones ya que crecen. Con una espumadera iremos dando la vuelta para que se vayan dorando por todo los lados.
Pon un plato con papel de cocina y otro con azúcar blanca.
Saca los buñuelos de la sartén, los vas poniendo sobre el papel de cocina para que suelten el aceite que sobra. Después los vamos rebozando por el azúcar y los pasamos a una fuente de servir.
Sigue con el resto de la masa hasta tener todos los buñuelos listos.
Servimos.
Montse