Por cierto, he utilizado espinacas frescas, pero podeis utilizar congeladas, y para ir más rápida la bechamel es comprada, pero podeis hacerla vosotros mismos, en este caso he sido cómoda, jajaja. Que lo disfruteis.
Ingredientes (para 3-4 personas):
16 placas de canelones
250 gr de carne picada
2 manojos de espinacas frescas (podeis utilizar congeladas)
Aceite de oliva
Sal
Piñones
1 cebolla morada
Bechamel
Queso ralladoAsí lo hago yo:
Ponemos a cocer las placas de pasta en una cacerola con abundante agua hirviendo y una pizca de sal durante 10 minutos. Las escurrimos y refrescamos en agua fría, y las extendemos sobre un paño de cocina sin superponerlas. Reservamos.
Por otra parte, cocemos las espinacas unos minutos en agua con sal, escurrimos y reservamos.
En una sartén ponemos un chorrito de aceite y pochamos la cebolla troceada, añadimos la carne picada, una pizca de sal, y los piñones. Por último, añadimos las espinacas bien escurridas y picadas.
Llenamos las placas de canelones con una cucharada de la mezcla que hemos preparado (o con la cantidad que podamos, porque a mi siempre se me sale la mezcla). Los vamos poniendo en una fuente de horno bien ordenaditos, si sobra mezcla, como ha sido mi caso, la ponemos por encima, cubrimos con la bechamel y terminamos con el queso rallado.
Introducimos en el horno y gratinamos unos minutos, hasta que coja un color doradito, y listo.