Si hay algo típico de Asturias, son los chigres. En peligroso proceso de extinción, son aquellos bares donde se sirve y escancia sidra. Tienen una característica que los hacen fácilmente diferenciables de cualquier otro bar y es que podemos ver el suelo alrededor de la barra con serrín; cuyo fin no es otro que absorber la sidra que chisca del vaso al escanciarla.
Es por todo esto que el olor de los chigres es muy característico: una mezcla entre serrín y sidra que a mi me hace rejuvenecer unos cuantos años en cuanto lo detecto.
La receta de hoy pertenece al libro "Platos típicos de Asturias" de María Luisa García.
INGREDIENTES (para 4 personas)
Carne de ternera: 800 gramos.
Cebolla grande: 1.
Pimentón dulce: 1/2 cucharada.
Vino blanco: 1 vaso.
Laurel: 1 trozo.
Guindilla.
Aceite de oliva virgen extra.
Ajo.
Perejil.
Sal.
ELABORACIÓN (TRADICIONAL:
Cortamos la carne en dados, la sazonamos con ajo muy picado y la dejamos reposar 1 hora.
Troceamos la cebolla. En el mortero machamos dos dientes de ajo y una rama de perejil y lo desleímos con el vino.
Salamos la carne y la rehogamos en una cazuela con el aceite de oliva caliente. Añadimos la cebolla picada, el laurel, un poco de guindilla. Removemos bien y añadimos el majado del mortero.
Tapamos la cacerola y dejamos cocer a fuego bajo hasta que la carne esté tierna. Si se queda sin caldo se puede añadir agua fría poco a poco.
ELABORACIÓN (CROCK-POT):
Cortamos la carne en dados, la sazonamos con ajo muy picado y la dejamos reposar 1 hora.
Troceamos la cebolla. En el mortero machamos dos dientes de ajo y una rama de perejil y lo desleímos con el vino.
Salamos la carne y la rehogamos en una cazuela con el aceite de oliva caliente. Añadimos la cebolla picada, el laurel, un poco de guindilla. Removemos bien y añadimos el majado del mortero.
Dejamos que se evapore el alcohol y pasamos todo el contenido de la cacerola a la Crock-Pot.
Cocinamos durante 4 horas en temperatura alta.