La salsa holandesa es una receta muy usada en la cocina francesa, una especie de mayonesa pero más líquida y que se elabora con mantequilla clarificada en vez de aceite. Se suele sazonar con zumo de limón, sal pimienta molida.
No es una salsa complicada pero si hay que tener cuidado porque se corta muy fácilmente. Además hay que clarificar la mantequilla para separar la grasa del suero láctico, lo que hace que sea un poco más entretenido...
Pero merece la pena, pues queda una salsa muy delicada y que dará un sabor muy especial a nuestros platos. Es ideal para acompañar pescados o mariscos, aunque también se puede usar con verduras o con huevos gratinada ligeramente.
Ingredientes:
- 2 yemas de huevo
- 250g de mantequilla clarificada
- 2 cucharadas de zumo de limón
- sal al gusto
- pimienta molida al gusto
Lo primero que hemos de hacer es clarificar la mantequilla.Ponemos la mantequilla en un cuenco al baño maría y a fuego medio, sin que llegue a hervir el agua, dejamos que se derrita sin removerla dejando que se separe el suero de la grasa.
La retiramos del fuego y le quitamos las impurezas, la podemos colar con un colador. La dejamos enfriar casi del todo a temperatura ambiente.
En el vaso de la batidora ponemos las claras de huevo, añadimos sal al gusto y pimienta molida al gusto.
Después añadimos el zumo de limón y la mantequilla. Comenzamos a batir con la batidora sin moverlo demasiado y poco a poco veremos que va espesando, cuando esté montada la retiramos a un bol.
Lista para servir . No la metemos en el frigorífico, pues al enfriar demasiado se endurecerá la mantequilla.
¡Queda riquísima!
Os dejo el vídeo donde podéis verlo más claramente...si os gusta, podéis seguirme en mi canal de youtube.