Después de comer nos acercamos a Gijón, nuestra segunda visita a esta preciosa ciudad. A diferencia de la primera vez que fuímos, en esta ocasión la lluvia no hizo acto de presencia y aunque el sol no asomó con ganas la tarde estuvo iluminada por la encantadora Bego de "La cocina de Samira". Fue un placer conocer a una de mis blogueras favoritas en persona. Unas horas muy agradables que pasamos tanto yo como Juan charlando un poco de todo, riéndonos y comiendo macarons, jeje... la tarde se hizo corta y había que volver para casa, pero segurísimo que nos volveremos a ver!!!
El día que lo hagamos, espero que Bego me traiga una docenita de cookies de nutella con las que tanto me tentó hace unas semanas. Que tapáramos los ojos, decía, ni así... porque no tenía la nutella, sino en ese mismo momento me pondría manos a la masa!!!
En cuanto pude me hice con un bote, pequeñito, jeje, pero el problema fue que casi me lo acabo antes de hacer las galletas... no se que tendrá la cremita pero a cucharadas está para dejar el bote limpio!!!
Si no me llegaba suficiente chocolate con la nutella y las pepitas hice la masa de la galleta también de chocolate... chocolate llama a chocolate, jejeje. Están para morirse de buenas, una te pide otra y... si les hago caso me las acabo, jejeje. A Juan le encantaron también y eso que no es chocolatero como yo!!! Como diría Bego: "vaise do mundo" jejeje.
INGREDIENTES:
100 gr. mantequilla
1 huevo (el mío era pequeño)
100 gr. azúcar moreno
150 gr. harina
15 gr. cacao en polvo
1 cucharadita levadura
pizca de sal
60 gr. pepitas chocolate
nutella
PREPARACIÓN:
Batimos la mantequilla con el huevo y el azúcar. Añadimos la harina con el cacao, levadura y sal mezclando hasta incorporar. Agregamos las pepitas de chocolate a la masa, la tapamos con film y dejamos reposar media horita en la nevera.
Pasado este tiempo vamos cogiendo porciones de masa y en el centro le ponemos una cucharadita de nutella, le damos forma de bola, sellándola bien para que no escape y las vamos colocando sobre la bandeja del horno.
Con el horno precalentado a 200º horneamos unos 10 minutos. Las dejamos enfriar sobre una rejilla y las escondemos para que nadie nos las coma, jejeje.