Pero si aún podía tener mis dudas, resultó que mi querida Nati de Con Harina en Mis Zapatos ya había preparado esta receta, así que pensé que nada mejor que hacer un 2x1. Preparar un delicioso postre rumano y recomendaros uno de los mejores blogs culinarios de este país. ¿Alguien da más?
Con Harina en Mis Zapatos es de esos blogs que me gustan a mí, porque además de recetas buenísimas, Nati hace unas fotos preciosas y lo mejor, da gusto leer lo que escribe. Pequeñas historias, muchas explicaciones y un no-sé-qué o un qué-sé-yo que enamora. Y luego están los famosos natismoothies que nos traen a todas locas, sanísimos y deliciosos.
Así que, no os digo más, aprovechando que le robo esta receta, os vais corriendo a su blog, que os va a encantar.
En cuanto al cozonac, os diré que es un dulce tradicional no sólo de Rumania sino también de Bulgaria, Macedonia y Albania. En Rumania es típico prepararlo en Navidad, o en Pascua. Aunque es una receta laboriosa, no es complicada y de veras, este pan dulce es absolutamente maravilloso.
He seguido prácticamente al pie de la letra la receta de Nati, aunque yo he reducido los ingredientes a la mitad y he utilizado la panificadora para el levado. Espero que la probéis y me contéis el resultado. Vamos allá.
Cozonac de nueces {cozonac cu nuca}
Ingredientes:
Para la masa madre:
50 ml de leche entera, ligeramente templada.
50 g de harina.
12 g de levadura fresca.
Para la masa:
la masa madre que hemos elaborado.
225 g de harina.
75 ml de leche tibia.
50 g de mantequilla en pomada.
45 g de azúcar.
una pizca de sal.
5 ml de miel.
1 huevo.
ralladura de una naranja
Para el relleno:
200 g de nueces picadas.
1 cucharadita de cacao en polvo.
50 g de azúcar moreno.
2 cucharadas de miel.
Preparación:
1. Nati explica todos los pasos perfectamente para elaborar este cozonac a mano. Así que si no tenéis panificadora, tenéis la explicación de la receta en su blog, os dejo aquí el enlace.
2. Para elaborar la masa madre, simplemente tenemos que templar un poquito la leche, simplemente quitarle el frío de la nevera, y disolver en ella la levadura. Después incorporamos la harina, mezclamos bien y dejamos reposar en un lugar templado entre 30 y 45 minutos.
3. En la panificadora, utilizo el programa de amasado que en mi máquina dura 1 hora y media. Ponemos en la cubeta la harina, la masa madre, la leche, el huevo ligeramente batido, el azúcar, la sal, la miel y la ralladura de naranja. Comenzamos el programa.
4. Cuando veamos que los ingredientes están bien incorporados, añadimos la mantequilla muy blandita, sin parar el programa.
5. Mientras preparamos el relleno, mezclando todos los ingredientes. En vez de las nueces picadas, también podemos poner nueces molidas.
5. Cuando termine el programa, al cabo de una hora y media, la masa habrá levado y doblado su volumen. La dividimos en dos partes, le quitamos el aire, y la estiramos un poco sobre una superficie enharinada. Sobre cada una de las partes repartimos la mitad del relleno. Enrollamos cada una de las partes, las trenzamos entre sí y colocamos en un molde cuya base habremos forrado con papel de horno y cuyas paredes habremos untado con mantequilla.
6. Damos tiempo a un segundo levado, probablemente más corto que el anterior, hasta que la masa vuelva a aumentar su tamaño.
7. Cuando esté lista, pintamos la superficie con leche y horneamos a 180ºC durante unos 35 minutos. Si se dora demasiado pronto, cubrimos con papel de aluminio.
8. Retiramos del horno, dejamos reposar unos minutos en el molde, y después desmoldamos y dejamos enfriar sobre una rejilla.
Por último, no dejéis aquí este maravilloso viaje. El recorrido por la repostería rumana sigue de la mano de los participantes en el reto, todas las recetas, pinchando en el logo.
Fuente: este post proviene de No Sin Mi Taper, donde puedes consultar el contenido original.
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