Pasadas las fiestas a todos nos entran unas ganas tremendas de soltar todos los kilos que alegremente hemos acumulado durante la Navidad. Es unos de los propósitos de Año Nuevo que todos nos hacemos y aunque la voluntad no ayuda mucho hay que ponerse en marcha, reducir calorías y moverse más.
A mi me cuesta ponerme en marcha, lo reconozco. Tampoco necesito hacer dieta estricta, afortunadamente no me sobran muchos kilos, quizá un par de ellos (aunque seguro que alguna amiga me regañaría por decir esto), pero lo de comer sano nunca viene más. El caso es que en el grupo de facebook "cocinar con thermomix" en el que participo, nos proponen cada semana un plato y cada uno tiene que subir la foto de su versión.
Durante las fiestas los platos han sido más festivos, pero ahora por petición popular han sugerido platos más ligeros, en concreto cremas de verduras.
Yo he aprovechado una bolsa de espinacas frescas para preparar esta crema de espinacas, que me va a servir para cenar esta noche, participar en el grupo y tener una nueva entrada en el blog.
Es una crema tan ligera, que la voy a incluir en el apartado de dieta, porque no lleva patata, ni quesitos, ni nata (crema de leche), tan solo un poquito de leche evaporada que ya sabéis que es ideal para las cremas y salsas.
INGREDIENTES:
1 diente de ajo.
½ cebolla.
300 gr de espinacas frescas.
15 gr de aceite de oliva virgen.
300 gr de agua.
50 gr de leche evaporada.
Sal y pimienta al gusto.
2 rebanadas de pan de molde.
1 puñado de piñones.
PREPARACIÓN:
Ponemos en el vaso el ajo y la cebolla en cuartos y picamos dos segundos a velocidad 6.
Bajamos los restos hacia las cuchillas y añadimos el aceite y pochamos 5 minutos, varoma, velocidad 1.
Agregamos las espinacas frescas y trituramos unos segundos a velocidad 4 para bajar las espinacas y que quepan todas. Añadimos la sal y la pimienta y el agua.
Cocemos diez minutos, 100º, velocidad 1.
Al acabar retiramos un cucharón de caldo (mas o menos como medio vaso) y esperamos que baje un poco la temperatura para triturar 15 segundos a velocidad 7.
Comprobamos si la crema está a nuestro gusto de textura y rectificamos de sal y pimienta si creemos necesario.
Incorporamos la leche evaporada y volvemos a triturar quince segundos a velocidad 7.
Mientras tostamos las rebanadas de pan de molde y servimos la crema con un puñado de piñones encima.
Vamos a picar el ajo y la cebolla.
Una vez picados añadimos el aceite y lo sofreímos un poco.
Una vez sofrita la cebolla agregamos las espinacas. Como abultan mucho las picamos con la thermomix un poco.
Ya está, ahora entran mejor. Echamos la sal y la pimienta al gusto y el agua. Y cocemos.
Ya tenemos las espinacas cocidas.
Ahora retiramos parte del caldo, medio vaso mas o menos.
Dejamos que baje la temperatura del vaso y trituramos las espinacas. Agregamos la leche evaporada y volvemos a triturar de nuevo hasta que nos quede una textura cremosa.
Ahora vamos a tostar dos rebanadas de pan de molde. Como no tengo tostadora lo hago en una sartén.
Ya están las tostadas.
Para darle un toque más chic he cortado las tostadas con un cortapastas. Este tiene forma de flor, pero con el cubilete, en redondo, queda también muy bien.
Y servimos nuestra cremita con unos piñones encima y con la tostada de pan.
Una crema suave, ligera y deliciosa.
Queda muy cremosa y suave, y totalmente ligera. Con esta receta os salen cuatro platos.
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