Dicen que la cocina es un arte, para el que se necesita creatividad, dedicación, cariño, sensibilidad, paciencia, tiempo, sacrificios, todo ello para alimentar a los demás.
Cocinar con cariño, es preparar ingredientes con la sencilla motivación de satisfacer y que disfruten del trabajo realizado y del mimo con el que se han preparado los platos, es darle un ingrediente extra a las comidas, como la sal y la pimienta, es tangible, se nota y lo notan; el amor transforma los alimentos.
Siempre suelo decir que cocinar no es una ciencia exacta, es pura química y hay que experimentar una y otra vez hasta obtener la destreza necesaria para conseguir dar el punto exacto a cada receta, aunque nunca se termina de aprender.
Es hermoso que a partir de ésa experiencia, con cosas aisladas, productos diferentes, se pueda crear, cambiar, innovar multitud de platos, en definitiva hacer la comida que queramos, lo que se nos ocurra, lo que nos guste. Y eso hice..........
¿Qué podía perder? ¿Tiempo, los ingredientes, fregar los cacharros.....? Pués venga a experimentar lo que se me ha ocurrido: Cerrar los ojos, recordar los maravillosos momentos vividos en lugares caribeños, en todos nuestros viajes cruzando el Atlántico, en el Caribe....El resultado una riquísima crema de piña colada.
¿Cómo la hice?
Mezclar con la batidora dos vasos de leche de coco con tres rodajas de piña en almibar y colar a fin de que no queden trocitos
Volver a echar la mezcla en la batidora junto con tres huevos, cinco cucharadas soperas de azúcar, una cucharada sopera de maizena, una copita de ron ( puse ron Habana añejo) y mezclar procurando que quede homogénea la crema.
Ponerla en una cacerola y removiendo constantemente llevar a ebullición durante uno o dos minutos.
Dejar templar, repartirlo en las copas donde se vaya a servir y meter en el frigorífico.
Mientras preparar las migas de chocolate (siguiendo los pasos de Dolors, http://blogdecuina.blogspot.com)
Mezclar 5 cucharadas soperas de harina y 60 gramos de mantequilla blanda, hasta que se forme una mezcla grumosa.
Añadir una cucharada sopera, bien colmada, de cacao en polvo y dos cucharadas soperas de azúcar (usé azúcar moreno) y mezclarlo hasta que se integren
Precalentar el horno a 180º y sobre papel de hornear extender bien (sin aplastarlas) y hornear durante diez minutos, con cuidado de que no se quemen, pero que queden crujientes
Una vez sacadas del horno, remover bien y dejar enfriar.
Sacar la crema de piña colada del frigorífico y echar las virutas de chocolate por encima
¿Gustan?
Disfruten un buen fin de semana..