Enseguida me puse a pensar qué receta podía hacer con este yogur y buscando inspiración en la red me encontré con una receta fantástica de Eva Arguiñano. Era algo diferente que jamás se hubiera ocurrido probar de hacer con el yogur. El resultado ha sido bastante bueno, a pesar de que casi se me quema el merengue, es que tengo un horno relativamente nuevo y todavía no le tengo pillado el punto del gratinado, va súper rápido por lo visto.
El aspecto me recuerda a una especie de flan o natillas con sabor a yogur. Es una combinación algo rara, porque visualmente esperas un sabor y luego te encuentras el punto ácido del yogur en contraste con el dulzor del merengue. A mi personalmente, me ha gustado mucho; a mi marido no tanto, pero claro, sobre gustos no hay nada escrito. De todas maneras, quizás me he quedado algo corta de azúcar en la mezcla del yogur, pues al ser un producto ya azucarado no he querido añadirle más. Si sois de gustos dulces os recomiendo que le pongáis un poco más, ya sea azúcar, miel, azúcar de coco u otro endulzante.
Yo he versionado un poco la receta original, pues en el fondo he puesto un poco de galleta machacada con mantequilla que la verdad es que le da un toque diferente y crujiente muy rico.
Ingredientes para 2 raciones
200gr. yogur Danone a Tu Gusto (o 2 yogures convencionales)
2 huevos
1 o 2 cucharada de azúcar glass
1/2 limón (ralladura o aroma)
4 galletas
1 cucharada de mantequilla
Separamos las yemas de las claras.
Mezclamos el yogur con las yemas. Si lo queremos más dulce o utilizamos yogur no azucarado, añadimos una cucharada de azúcar a la mezcla. Batimos bien con unas varillas eléctricas.
Trituramos las galletas y fundimos la mantequilla. Mezclamos la mantequilla con las galletas.
En un par de recipientes aptos para el horno cubrimos el fondo con la mezcla de galletas, presionando ligeramente.
Encima de las galletas colocamos la mezcla de yogur.
Horneamos a 150ºC durante unos 20/25 minutos. Retiramos y dejamos enfriar.
Montamos las claras a punto de nieve. Cuando estén casi montadas agregamos el azúcar glass y la ralladura de limón o unas gotitas de aroma de limón. Seguimos batiendo hasta montar.
Colocamos el merengue sobre la mezcla de yogur horneada y lo metemos de nuevo en el horno, esta vez en modo gratinar unos pocos minutos. Vigilando que se dore pero que no se nos queme.
Y ya tendremos listo nuestro postre a base de yogur. Estoy segura que sorprenderá, pues es algo diferente e inusual. Os dejo una cucharadita para que lo probéis y ya me comentáis qué os ha parecido
El merengue es importante añadirlo cuando la crema de yogur haya enfriado, para evitar que se desmorone con el calor.
Siempre podemos sustituir el azúcar por stevia o azúcar de coco y hacer la receta más saludable.