¿Cansado de las mismas salsas para el pollo de una y otra vez? ¿Harto de comer siempre los mismos sabores sin alma y sin nada que ofrecer? No te preocupes porque hoy te enseñaré a hacer una deliciosa "Salsa de Zanahoria y Jenjibre" ideal para el pollo por su suavidad, cremosidad, llena de sabor y además muy, muy fácil de hacer. Porque el comer bien no va reñido con pasarse horas y horas en la cocina.
Los rizomas se utilizan en la mayor parte de las cocinas del mundo a través de la cocina asiática. Los rizomas tiernos son jugosos y carnosos, con un fuerte sabor. Se suelen conservar en vinagre como aperitivo o simplemente se añaden como ingrediente de muchos platos. Las raíces maduras son fibrosas y secas. El jugo de los rizomas viejos es extremadamente picante y a menudo se utiliza como especia en la cocina china para disimular otros aromas y sabores más fuertes, como el marisco y la carne de cordero.
En la cocina occidental, el jengibre, seco o en polvo, se restringe tradicionalmente a alimentos dulces; se utiliza para elaborar caramelos, pan de jengibre, para saborizar galletas (como los populares Hombres de Jengibre) y como saborizante principal de la gaseosa de jengibre o ginger ale, bebida dulce y carbonatada.
Además de por sus usos culinarios el jenjibre tiene un montón de propiedades beneficiosas y así las han aprovechado desde tiempos inmemoriales personajes como Galeno, el famoso médico griego, lo usaba como medicamento para corregir los tumores, defectos del cuerpo y en tratamientos de parálisis causados por exceso de flema. Avicena, reconocido médico persa de la cultura islámica clásica, lo recomendaba como afrodisíaco, altamente beneficioso en el tratamiento de la "debilidad sexual". En investigaciones médicas se ha comprobado que la raíz de jengibre es un efectivo tratamiento contra las náuseas causadas por los mareos en medios de transporte, así como las padecidas por las mujeres embarazadas. Podría estar horas hablando de este rizoma y sus beneficiosos aportes para curar algunas enfermedades, por lo que es altamente recomendado y desde aquí os animo a consumir más este valioso producto de la naturaleza.
Información nutricional por 100gr:
120 Calorías
4,72gr de Grasas
2,51gr de Hidratos de Carbono
16,31gr de Proteínas
Alérgenos e intolerancias
Ingredientes para 8 personas:
8 Jamoncitos de Pollo
8 Champiñones grandes
6 Zanahorias gordas
70gr de Jenjibre fresco
1l de Caldo de Pollo casero.
1 Patata mediana
Sal
Pimienta blanca
Pimienta negra
Aceite de oliva virgen extra
8 Cucharadas de chutney de manzanas
Harina de trigo
Elaboración:
1- Pelamos y lavamos las zanahorias, el jenjibre y la patata, las cortamos en trozos grandes e irregulares y las ponemos a cocer todo junto en una cazuela con el caldo de pollo hasta que esté bien tierno todo, lo trituraremos y colaremos con ayuda de un colador chino de malla fina, pondremos de nuevo al fuego y rectificaremos de sazonamiento salpimentando con la pimienta blanca, reservamos cociendose a baja temperatura.
2- Los jamoncitos de pollo los salpimentamos con la pimienta negra, los pasamos por harina y los doramos sellando la superficie por todo alrededor, los escurrimos en una bandeja con papel absorvente y cuando estén libres de grasas los metemos en la salsa de zanahorias para que se terminen de cocinar durante unos 25 minutos. Cuando queden 5 minutos para terminar de cocinarse añadiremos los champiñones bien lavados y sin el tallo, cortados en cuartos.
3- Sólo nos resta servir este plato de Pollo en salsa de zanahorias al jenjibre que como veis más sencillo y fácil de hacer no puede ser y cambiamos radicalmente de registro a la hora de preparar nuestros platos de pollo. Servimos uno o dos jamoncitos por ración dependiendo de si es plato principal con entrantes o si es plato unico. Acompañamos con los champiñones en cuartos y una cucharada de chutney de manzanas casero.
Fotos:
Notas, Trucos y Consejos:
*Podéis usar el pollo entero cortado en trozos para guisar que os puede preparar vuestro pollero.
*Si es un plato unico podéis acompañarlo con unas patatas fritas y un poco de arroz blanco para completar un platazo.
*Si la salsa se os queda muy espesa podéis añadir un poco más de caldo de pollo casero o agua hasta que obtengais la textura que deseais, y si por el contrario se os queda muy aguado podéis espesarlo con un poco de maizena diluida en agua o caldo frío.
*Esta salsa con calabaza queda igual de buena.