Una de las sopas malagueñas más sencillas es sin lugar a dudas el "en blanco". Se trata de una sopa muy humilde cuya base es un caldo de pescado bastante propicio para asentar el estómago en caso de encontrarnos enfermos.
Antiguamente se solía preparar con jureles o incluso con chanquetes. Hoy en día solemos utilizar la pescada o la rosada ya se trata de pescados que tienen menos espinas.
Ingredientes:
1 pescada
2 patatas hermosas
1 cebolleta
1 pimiento verde
1 tomate
1 cabeza de ajos
3 hojas de laurel
Aceite de oliva virgen extra
Sal
Pimienta negra molida (opcional)
Pelamos y cascamos las patatas. Las colocamos en una cacerola junto con el pimiento limpio de semillas, el tomate partido por la mitad, la cebolleta, la cabeza de ajos y las hojas de laurel.
Cubrimos con agua y un pellizco de sal. Añadimos una cucharada de aceite de oliva y dejamos que hierva a fuego medio hasta que las patatas estén casi hechas.
En ese momento agregamos el pescado limpio y cortado en rodajas. Dejamos al fuego unos minutos, lo justo para que se haga el pescado.
Probamos para rectificar de sal en caso necesario.
Servimos colocando las patatas y el pescado en un plato. Lo cubrimos con el caldo. Añadimos un buen "chorreón" de limón y un hilo de aceite de oliva antes de tomarla. Si os gusta la pimienta, también se le puede poner un pellizco.
Hay quien le gusta poner en el plato una rebanada de pan cateto "asentao" para que se empape en el caldo y tomarlo con la sopa.