Terminamos la semana con una ensalada, pero no una ensalada cualquiera. Sino una ensalada que se convierte en plato único por la rotundidad de sus ingredientes. En un "tuneo" a una ensalada de Sergi Arola, que llevaba rúcula y solomillo de atún en conserva. Yo he sustituido la rúcula por las espinacas que están de temporada y el solomillo de atún en conserva por atún fresco cocinado a la plancha. El conjunto se completa con nueces, pera y tomates secos en aceite. ¿No os parece una combinación perfecta?.
INGREDIENTES (para 2 platos como el de la foto):
Unas hojas de espinaca frescas
Un puñado de tomates secos en aceite (los míos caseros)
50 gr. de nueces peladas
1 o 2 peras conferencia
250 gr. de atún fresco cortado en taco
Sal en escamas
Para la vinagreta:
Aceite de oliva virgen extra
Vinagre balsámico
Sal
PREPARACIÓN:
Lavamos las espinacas bien y cortamos las hojas. Secamos bien y reservamos. En una sartén sin aceite ponemos la pera pelada y cortada en tiras, dejamos unos minutos hasta que cambie de color. Añadimos los tomates secos también cortados en tiras, y un poco del aceite de la conserva. Rehogamos unos minutos más, añadiendo también las nueces.
Ahora cortamos el atún en tacos pequeños y marcamos éstos en una plancha con un poco de aceite, dejando el interior rosado, para que resulte jugoso por dentro. Mientras, preparamos la vinagreta. Para ello emulsionamos un poco de vinagre balsámico en un buen AOVE y añadimos sal. Procedemos a emplatar. Añadimos al plato los hojas de espinacas. Añadimos también la pera, los tomates y las nueces. Colocamos el atún, añadiéndole por encima unas escamas de sal (yo le puse Sal de Ibiza con hibiscus), rociamos todo con la vinagreta y servimos.
Con esta ensalada tan exquisita os dejo hasta el lunes. Espero que paséis un buen fin de semana.
Lidia.