¡Hola a todos! Hoy os traigo una receta de cupcakes red velvet, perfecta para servir de postre o merienda en cualquier ocasión.
Además, haciéndolos, os divertiréis y pasaréis un rato muy agradable.
Ingredientes para 12 cupcakes
Para el bizcocho
150 g de harina tamizada
60 g de mantequilla sin sal
120 ml de leche
150g de azúcar
1 huevo
1 y 1/2 cucharaditas de extracto de vainilla
1 cucharadita de zumo de limón
1/2 cucharadita de bicarbonato de sodio
1 cucharadita de vinagre blanco
8g de cacao en polvo
1 cucharadita de colorante rojo en pasta
Para la cobertura
250g de azúcar glass
120g de mantequilla sin sal
120g de queso crema frío
Preparación
Os aconsejamos que todos los ingredientes los uséis estén a temperatura ambiente, menos el queso crema, que debe usarse frío.
En primer lugar, añadiremos el zumo de limón a la leche y dejaremos reposar durante aproximadamente 15 minutos.
En un bol, agregaremos el cacao a la harina y mezclaremos bien.
En otro bol, mezclaremos la mantequilla y el azúcar, durante unos 5-7 minutos aproximadamente, hasta que veamos que el azúcar se haya integrado con la mantequilla.
Mientras vamos batiendo, añadiremos el huevo y seguiremos batiéndolo todo, hasta conseguir que quede una mezcla esponjosa y de un color más suave.
Cuando lleguemos a este punto, añadiremos extracto de vainilla y seguiremos batiendo.
Añadiremos la mezcla de harina y cacao, junto con la leche que teníamos reservada anteriormente. Este proceso lo iremos realizando poco a poco, para que todos los ingredientes queden perfectamente integrados e iremos batiendo a la potencia más baja y dejaremos de batir, cuando veamos que todos los ingredientes se han mezclado correctamente.
A continuación, mezclaremos el vinagre con el bicarbonato, cuando empiece a hacer reacción, añadiremos la mezcla sobre la masa y batiremos un poco más.
En este momento, añadiremos la cucharadita de colorante en pasta y mezclaremos bien con la masa.
Batiremos, hasta que la masa adquiera un color homogéneo.
Ahora ya tenemos la masa reparada para rellenar nuestras capsulas de magdalenas, solamente hasta llegar a ¾ de la capacidad de la cápsula.
Una vez las tengamos todas rellenas, damos unos golpecitos en la bandeja, para que se distribuya bien toda la masa y lo introduciremos en el horno precalentado a 160º C durante 20 minutos aproximadamente (como siempre, la temperatura y el tiempo, dependerá de vuestro horno).
Cuando los saquemos del horno, los dejaremos reposar durante aproximadamente 4-5 minutos, y después, los sacaremos de la bandeja, para que no se humedezcan y se despeguen de las capsulas.
Para que quede el bizco más esponjoso y no se quede seco, podemos poner un poco de almíbar.
En este caso hemos preparado una cobertura de queso, ¡que queda deliciosa!
Pondremos la mantequilla en la batidora, y durante aproximadamente 3 minutos, la batiremos a velocidad alta, para que se vuelva más esponjosa.
Añadiremos el azúcar glass, pero mezclaremos estos dos ingredientes, primero a mano, para que el azúcar glass, no salga volando y se forme una nube de azúcar en la cocina, y después seguiremos con la batidora.
Por último, añadiremos el queso crema frío y dejaremos que se mezcle todo durante 2-3 minutos más.
¡Pasados estos minutos, ya tenemos todo preparado para empezar a decorarlos, podéis usar la manga pastelera junto con las boquillas que más os guste!
¡Ahora solo queda…disfrutar este delicioso dulce!
Fuente: este post proviene de La maleta de Maggie, donde puedes consultar el contenido original.
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