¡Nada, nada!, que no se puede salir a la calle con la que está cayendo...así que no me queda más remedio que quedarme en casa si no quiero parecer un pollo mojado. Pongo la tele un rato....que si Podemos, que si corruptos, que si telenovelas de hace 20 años, que si por enésima vez el capitulo de Castle....
Mejor apago la tele y me pongo a cocinar algo para una tarde de lluvia....a ver que tengo en la despensa????? mira la almendra que compré para hacer más panellets (los primeros que hice duraron apenas tres horas) y que luego no tuve tiempo. A ver que receta puedo hacer...
Pues unas sencillas galletas que no requieren casi tarea y que siempre quedan buenísimas. A estas les añadí un poco de canela y jengibre y han quedado de lujo además de dejar un olor maravilloso en toda la casa a la hora de hornearlas.
- INGREDIENTES:
3 claras de huevo
250 gr de almendra molida
200 gr de azúcar glacé
2 cucharillas de canela molida
1 cucharilla de jengibre en polvo
1 pizca de sal
- ELABORACIÓN:Encendemos el horno a 180 ºC.
En un cuenco grande ponemos los ingredientes secos y mezclamos bien.
En otro cuenco batimos ligeramente las claras de huevo, apenas un minuto. Mezclamos con el resto de los ingredientes hasta que estén todos bien integrados.
En la fuente del horno, ponemos un papel sulfurizado y con ayuda de una cuchara vamos poniendo pequeñas porciones que serán nuestras galletas. Les damos la forma con las manos (la masa es muy pegajosa).
Horneamos unos 15 minutos (dependerá un poco de vuestro horno). Hasta que estén bien doradas.
Sacamos y dejamos reposar sobre una rejilla al menos diez minutos. Podemos espolvorear algunas con más azúcar glacé y las guardaremos en una lata o bote hermético para conservarlas más tiempo.
- MARIDAJE:
Un café es fantástico para acompañar estas ricas galletas. Si queremos un vino, por supuesto un moscatel potenciará los toques especiados.
- COSTE: barato.
- DIFICULTAD: fácil por no decir facilísimo.
- TIEMPO: 40 minutos.
- CALÓRICO: a ver con 200 gr de azúcar pa que preguntas!!!