Lo más interesante de esta receta de galletas es que no llevan huevo, como tradicionalmente se añade. Además de que pueden consumirla personas alérgicas al huevo, me gusta mucho porque vamos a obtener un resultado muy crujiente y fino, como las pastas de té. Esta receta es la que suelo utilizar cuando hago galletas decoradas, solo que esta vez he optado por añadir un puñado de pistachos que le ha dado un toque más crocante y delicioso.
Ya se acerca la Navidad y este tipo de recetas me encantan, pues ahora me gusta mucho tener invitados para una merienda y a todo el mundo les encantan. También son ideales para hacer un regalo hecho por ti. Al hacer las galletas puedes meterlas en bolsitas individuales, cerrarlas con una bonita cuerda e incluso hacer pegatinas felicitando un cumpleaños o la Navidad.
Desde SilikoMart me enviaron este molde de silicona para galletas tan chulo y fácil de usar. Viene con un cortador de galletas con el tamaño perfecto para las láminas de chocolate ¿no es ideal?
Galletas de pistacho y chocolate sin huevo (30 unidades)
Ingredientes
150 gr mantequilla
75gr azúcar glass
250gr harina
30gr pistachos pelados
1 cucharadita esencia vainilla
150gr chocolate para fundir
Elaboración
Debes tener la mantequilla a temperatura ambiente, punto pomada. Luego mézclala con el azúcar glass y la vainilla hasta integrarlo durante 1 minuto aproximadamente.
Añade luego la harina y mezcla lentamente hasta que todo esté integrado.
Tritura los pistachos y añádelos también a la masa, terminando de mezclar todo. Haz una bola de masa, cúbrela de film transparente y lleva a refrigerar durante 1 hora.
En una superficie limpia, pon un papel de horneado y la bola de masa encima. Cúbrelo con otro papel de horno y amasa con un rodillo la masa entre los dos papeles.
Extiende bien toda la masa hasta dejarla de una altura de unos 4-5mm y siempre entre los papeles de horno.
Vuelve a llevarte la masa al frigorífico durante otra hora, sin sacarla del papel. Es una masa delicada, tiene que estar refrigerada para poder manejarla.
Precalienta el horno a 180ºC.
Al sacar la masa, usa el papel superior para forrar la bandeja del horno y utiliza el cortagalletas para cortar la masa con la forma. Coloca las galletas en la bandeja.
Hornea durante unos 10 minutos, hasta que el borde se empiece a dorar. No las dejes más tiempo, sino quedarán duras y no crujientes. Sácalas a una rejilla para que se enfríen.
Para hacer la lámina de chocolate, simplemente funde el chocolate al baño María o en el microondas.
Una vez fundido, reparte sobre el molde silicona y extiende con una espátula. Deja enfriar a temperatura ambiente durante 1 hora, y luego mete en el frigorífico al menos otra hora. Luego desmolda las láminas simplemente empujando desde arriba.
Para pegar las láminas a la galleta usa un poco de chocolate fundido, ¡y ya está!
Notas
Para obtener un resultado brillante y crujiente, es necesario templar el chocolate. Necesitarás un termómetro de chocolate y no es una tarea difícil. Puedes ver los pasos que dan desde Le Cordon Bleu.
¿Te animas a hacerlas? Las próximas recetas ya serán navideñas 100%, ¡así que ve preparándote!
Un saludo para quién esté al otro lado.