Y estoy encantada!!
Desde que descubrimos los gofres caseros, en casa nos hemos convertido en unos auténticos aficionados: ya sean dulces o salados, siempre son un éxito!
Además, es una receta muy sencilla y rápida y que admite cualquier variación!
Ingredientes
85 gr de mantequilla
375 ml de leche
1 cucharadita de extracto de vainilla
285 gr de harina
1 sobre de levadura seca
3 huevos
2 cucharadas de azúcar
una pizca de sal
Elaboración
Comenzamos derritiendo la mantequilla a fuego lento. Incorporamos la leche y la vainilla y mezclamos.
En un bol tamizamos la harina, el azúcar y la levadura. Añadimos en él la mantequilla con la leche y la vainilla. Finalmente, incorporamos las tres yemas y mezclamos todo hasta conseguir una masa espesa y homogénea. Dejamos reposar durante 1 hora.
Una vez pasado el tiempo, montamos las claras a punto de nieve con una pizca de sal y las incorporamos a la masa anterior.
Calentamos la gofrera siguiendo las instrucciones del fabricante. Echamos suficiente masa como para cubrir la base, cerramos la plancha y cocinamos durante 3 o 4 minutos (aunque esto puede variar en función de vuestra gofrera). Los gofres estarán hechos cuando queden dorados y se puedan retirar fácilmente de la plancha.
Y ya está!
Ahora sólo falta acompañarlos de lo que más os guste! (Aunque a mí sin nada también me encantan!)
En este caso yo los he preparado con mermelada de melocotón, melocotón y avellanas; y de frutas
deshidratadas y sirope de arce.
Espero que os gusten!