Por supuesto que para esta ocasión especial, buscamos alguna receta que sea imperdible, ya que este es un queso que nos regala su don de ser muy resistente a altas temperaturas y esto nos abre la puerta a varias opciones, como hacer alguna cocción con queso en la plancha o cocinarlo directamente a la parrilla que queda muy bien.
Bueno pero no, hoy apostamos por una receta que puede hacer cualquier mortal que no tenga una parrilla en casa, que sea fácil pero a la vez nos ayude a sacarle todo su potencial al Halloumi. Veamos entonces que nos ofrece, desde Chipre al mundo .
Sobre el queso halloumi
El halloumi es un queso blando y semi duro que nace en el sudeste de Europa, particularmente en Chipre y desde allí es que se fué expandiendo por el mundo causando furor y volviendo fanática a cualquier persona que lo prueba. En determinados lugares también se conoce como “queso chillón” o “chipriota”.Este queso es elaborado a base de leche de cabra fresca o leche de oveja en general ambas funcionan muy bien por su tenor graso, a veces también se puede conseguir el queso preparado con leche de vaca pero esto es más que nada en un formato más industrial, ya que esta última reduce considerablemente los costos de preparación. En su proceso de elaboración algunas personas le suman menta como una forma de proteger al alimento de las bacterias.
Su modo de conservación es característico ya que se guarda plegado junto a sus jugos naturales con un poco de agua y sal. Luego se envasa al vacío y de esta forma se puede mantener congelado hasta un año.
El halloumi puede incorporarse a la dieta de muchas maneras. Tiene un alto contenido en proteínas y calcio, y es bajo en sodio. El halloumi se puede comer crudo, a la plancha, frito o al horno. También puedes utilizarlo como cobertura de pizzas y pastas, o añadirlo a ensaladas y sándwiches.