En ésta ocasión os enseño a preparar unos helados tipo magnum de oreo, con trocitos de galletas oreo y muy cremosos en su interior, bañados en chocolate blanco con más trocitos de oreo, os encantará!
Estos helados están increíblemente ricos y además son muy fáciles de hacer, sin necesidad de usar heladera.
Si te gustan los helados caseros, puedes ver todas mis recetas (aquí).
Os ánimo a preparar estos deliciosos helados, están tan ricos que no podrás resistirte!
(Salen de 9 a 11 helados, según el tamaño de los moldes que uses)
Ingredientes para el relleno:
400 ml. de nata (crema de leche) para montar o crema para batir muy fría (35% M.G).200 grs. de leche condensada fría.
2 Cdtas. de pasta o extracto de vainilla.
10 galletas oreo trituradas (separamos 30 gramos para la cobertura).
Ingredientes para la cobertura:
400 grs. de chocolate blanco para fundir.90 grs. de aceite de coco o girasol.
30 grs. de galletas trituradas.
Preparación del relleno:
Metemos las galletas oreo en una bolsa de congelados y machacamos con un rodillo (tienen que quedar hechas trocitos, no hechas polvos), reservamos.Semimontamos la nata (crema de leche) (la nata (crema de leche), el bol y las varillas tienen que estar muy fríos).
Añadimos la leche condesada junto con la vainilla y batimos hasta integrarlas y quede una crema muy cremosa.
Agregamos las galletas oreo trituradas y mezclamos con una espátula con movimientos envolventes hasta repartirlas por toda la mezcla.
Rellemos los moldes, insertamos los palitos y tapamos con papel film, metemos en el congelador un mínimo de 8 horas o hasta el día siguiente (en caso de no tener estos moldes, podemos utilizar vasitos desechables).
Preparación de la cobertura:
Ponemos el chocolate en un bol y vertemos por encima el aceite, metemos en el microondas y calentamos en tandas de 30 segundos hasta que el chocolate se derretida y se integre con el aceite (dejamos templar).Pasado el tiempo, añadimos las galletas trituradas y mezclamos.
Vertemos el chocolate en un vaso alto, desmoldamos los helados y los vamos introduciendo en el chocolate, escurrimos un poco y los vamos poniendo sobre papel de horno mientras bañamos el resto.
Una vez los tengamos todos listos, los metemos en un recipiente con tapa o los envolvemos uno a uno en papel film y metemos en el congelador hasta el momento de consumirlos.