¡Hola! ¡Espero que estén muy bien! La receta de hoy surgió porque compré 5 kg. De frutillas (fresas), de las cuales congelé la mayoría y dejé otro poco para hacer alguna preparación horneada. Este kuchen es my común en el sur de Chile, el cual lleva una base delgada y abizcochada, luego una capa generosa de frutillas y finalmente, migas crocantes hechas con una masa simple. Hay otra variedad que también es muy común, la cual lleva una crema sobre la fruta, es una exquisitez y puedes ver la receta pinchando aquí.
En esta ocasión, quise hacer la masa de base en la licuadora, pero puedes perfectamente hacerla en un bowl con batidora eléctrica o manual.
El resultado final es muy rico, ideal para acompañar con un buen café (para mí todo es perfecto con un café!) o también- y por supuesto- para regalonear a la familia.
Las frutillas puedes usarlas cocidas o crudas, al almíbar o como prefieras. A mí me gusta simplemente macerarlas en un poco de azúcar un par de horas antes de añadirlas a la preparación.
La receta, a continuación.
Ingredientes
Para el relleno:
- 3 a 4 tazas de frutillas cortadas por la mitad
- 1/2 taza de azúcar flor o impalpable
Para la masa:
- 3 huevos
- 1/4 taza de aceite de canola o maravilla
- 1 y 1/4 taza de harina común
- 1 1/2 cucharadita de polvos de hornear
- 1/2 taza de azúcar granulada (también puedes usar panela, azúcar moreno, o la mitad en cantidad de tagatosa o alulosa)
-1 cucharadita de esencia de vainilla.
Para las migas:
- 1 taza de harina
- 3 cucharadas de mantequilla cortada en cubitos (a temperatura ambiente)
- 1/3 taza azúcar granulada
- 1 cucharadita de esencia de vainilla
Preparación:
Dejar macerando las frutillas con el azúcar flor o impalpable (la cantidad de azúcar es opcional, pero esta es una sugerencia. También puedes añadir algún edulcorante de tu preferencia).
En la licuadora añadir los ingredientes, primero líquidos (huevos, aceite y esencia de vainilla) y sobre estos, los ingredientes secos (azúcar, harina, polvos de hornear). Licuar hasta obtener una mezcla homogénea.
Poner esta mezcla en un molde para tarta enmantequillado y llevar al horno precalentado, por 15 minutos a 180-200º (dependiendo de tu horno). Debe cocinarse suavemente, pero no dorarse.
Mientras la masa se hornea, en otro bowl, agregar los ingredientes para la miga (harina, mantequilla, azúcar y esencia de vainilla) y unirlos con las manos, de manera que queden trozos grandes y otros más pequeños, como si fuese arena húmeda.
Transcurrido el tiempo del horno (15 minutos) retirar la base y añadir las frutillas, cubriendo todo y sobre éstas, agregar las migas, con cuidado para que no se caigan por los bordes.
Llevar nuevamente al horno, por 15-20 minutos, con la llama por encima o por los costados, para que las migas queden crujientes y las frutillas se ablanden.
Retirar del horno, dejar enfriar y servir.
¡También puedes servirlo tibio con un copo de helado!
Esta receta es más simple de lo que parece y perfecta para preparar con distintas frutas, por ejemplo: arándanos, moras, frambuesas, duraznos (melocotón), entre otros.
Espero que se animen a hacer esta receta, porque realmente queda muy buena.
¡Les envío un abrazo gigante! ¡Cuídense mucho!
Cleme
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Información Técnica:
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