Ingredientes para 8 comensales
Para el guiso: 3 pechugas de pollo limpias. 3 tomates medianos. 2 pimientos rojos. 1 cebolla grande. 2 cucharadas de alcaparras. 6 cucharadas de tomate frito. 4 cucharadas de aceite de oliva. Sal al gusto. Para la bechamel: 2 tazas de leche. 3 cucharadas de mantequilla o margarina. 6 cucharadas de harina de trigo. 1 cucharadita de sal. 50 gramos de queso parmesano. Para armar la lasaña: 18 láminas de pasta para lasaña (yo usé la que viene lista par usar que va directo al horno) 50 gramos de queso parmesan
Preparación del guiso:
Corta los tomates, los pimientos y la cebolla en julianas grandes, y los pones a cocinar a fuego medio en una olla junto con al aceite por unos 5 minutos, retira del fuego.
En una olla con agua pones a hervir las pechugas de pollo por al menos media hora, sacas, dejas enfriar y cortas en trozos no muy pequeños. (guarda el caldo del pollo para un sopa o como base para un arroz)
Vuelve a poner al fuego el guiso a fuego medio y le agregas el pollo, las alcaparras, el tomate frito, la sal y cocina por unos 10 minutos mas, retira del fuego, reserva.
Preparación de la salsa bechamel:
Une todos los ingredientes en una batidora o thermomix, pones a calentar a fuego medio revolviendo constantemente, alrededor de los 6 o 7 minutos, una vez que comience a hervir, notarás como va espesando, deja un par de minutos mas, retira del fuego y reserva.
Para armar la lasaña:
En un molde refractario rectangular grande, haces una primera cama con las láminas de la pasta (que quede toda la superficie cubierta, esto te llevará unas 7 u 8 láminas, a mi me gusta comenzar por la pasta para que luego al servirla sea mas fácil su manejo) luego procedes a echar una capa del guiso del pollo (la mitad del guiso) y lo esparces homogéneamente por toda la superficie, después sobre este guiso haces otra cama con el resto de las láminas de la pasta y sobre éstas, echas el resto de lo que te queda del guiso de pollo, igualmente esparces de la misma manera. Ahora le toca a la capa de bechamel, la repartes por toda la superficie uniformemente, que cubra todo, y por último le agregas el queso parmesano rallado (le puedes poner unos varios puntos de mantequilla o margarina para que el queso dore y quede tostadito). Metes el molde ya armado al horno a 220 grados a gratinar por unos 20 minutos o hasta que veas que el queso esté dorado, y listo, deja reposar unos cinco minutos antes de servir .. Verás que rico queda!!!
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