INGREDIENTES
12 placas de lasaña 700 gr de carne picada (de ternera y algo de cerdo) 1 cebolla 1 rama de apio 2 dientes de ajo 150 ml de vino blanco 350 ml de caldo de pollo 2 ó 3 cucharadas de tomate frito 2 tomates 1 cucharadita de maicena 250 gr de queso fresco 160 ml de leche semidesnatada nuez moscada queso rallado sal pimienta aceite
PREPARACIÓN
Picamos finamente la cebolla, el apio y el ajo. Calentamos aceite y ponemos a pochar la cebolla y el apio. Pasados un par de minutos incorporamos el ajo y sofreimos .
Cuando la cebolla esté transparente añadimos la carne y la salteamos unos minutos hasta que pierda el color rojo. Echamos el vino y cocemos 10 minutos a fuego lento. Incorporamos el caldo de pollo, los tomates troceados y el tomate frito. Sazonamos con sal y pimienta, tapamos y dejamos cocer unos 40 minutos, moviendo de vez en cuando para que no se pegue.
En un vaso echamos una cucharadita de maicena y la disolvemos en una pizca de agua fria. Agregamos a la carne, removemos hasta que la mezcla espese, y retiramos del fuego.
Preparamos las placas de lasaña según las indicaciones del fabricante. En mi caso utilicé láminas precocidas y solo tuve que disolverlas unos minutos en agua caliente.
Por otra parte, en el vaso de la batidora mezclamos el queso fresco con la leche y la nuez moscada. Batimos y si es necesario rectificamos el punto de sal.
Pasamos ya a montar la lasaña y mientras vamos precalentando el horno. En una fuente para horno extendemos una capa de láminas de lasaña, cubrimos con la mitad de la carne. Repetimos la operación: capa de láminas, carne y terminamos con otra capa de láminas. Cubrimos con la salsa de queso y espolvoreamos con queso rallado. Metemos a gratinar hasta que se dore la superficie.