No se si sabéis que soy fan absoluta del marisco. De pequeña odiaba las gambas, pero cuando aprendí a comerlas me fascinó todo lo que se le pareciera. Con el pescado no he tenido esa historia de amor, y, aunque nos llevamos bien y son muchos los pescados que suelo comer (viviendo en la Costa sería algo anormal no hacerlo) debo reconocer que el pescado no me entusiasma mucho. Por eso cada vez que preparo un plato de pescado intento maquillarlo o camuflarlo con otros ingredientes. Y ésto es lo que me ha pasado con estas lubinas. Quería darle un aire de fiesta y que os sirviera de idea o propuesta para las próximas comidas navideñas. Por lo que además de ponerle un puré de patatas con unas setas salteadas le he hecho una reducción de vino tinto y pasas y sazonado con flor de sal de con hibiscus.
INGREDIENTES (para cuatro personas)
2 lubinas limpias, abiertas y sin cabeza
Flor de sal o si no otro tipo de sal para aderezar el pescado una vez cocinado
Para el parmentier:
4 patatas
2 cucharadas de mantequilla
2 cucharadas de leche
Sal
Pimienta
250 gr. de setas (yo se las puse congeladas)
Un diente de ajo
Aceite de oliva virgen extra
Para al reducción de vino tinto:
Un vaso de vino tinto
Una cucharada de pasas sin hueso
4 cucharadas de azúcar
PREPARACIÓN:
Lavamos bien las patatas y con piel las ponemos a cocer en una olla con agua caliente hasta que estén tiernas. Mientras, prepararemos la reducción de vino tinto, para ello ponemos en un cazo un vaso de vino tinto junto con las pasas, dejamos reducir hasta la mitad. Entonces añadimos el azúcar y dejamos unos minutos hasta que se espese. Cuando las patatas estén cocidas pelaremos con cuidado, machacamos con un tenedor, le ponemos la mantequilla y la leche, salpimentamos, y mezclamos bien hasta conseguir un puré.
Salteamos en una sartén con un poco de aceite un ajo picado, añadimos las setas descongeladas y salteamos durante unos minutos, salpimentamos. Cortamos la lubina en dos filetes, y cada uno de ellos en dos trozos. Cocinamos en una plancha bien caliente con un poco de aceite, un par de minutos por cada lado. Mientras, montamos el plato con la ayuda de un aro de emplatar. En la base ponemos las patatas, después las setas, y por último el pescado. Añadimos un poco de flor de sal, y completamos el plato con la reducción de vino tinto. Servimos.
Se trata de un plato riquísimo donde todo combina muy bien, y convierten al pescado en un pescado de fiesta.
Feliz viernes.
Lidia.