Estamos en plena temporada de higos, y si tenéis la suerte de tener una higuera, o como en mi caso un vecino que la tenga y me los regala, pues estupendo; Ésta mermelada de higos está preparada con esos que al cogerlos se rajan un poco, o que con el tiempo se van estropeando, y a mí me da mucha pena tirarlos, así que han servido para prepararla, por cierto, ha salido ¡riquisíma!
Con las cantidades que os pongo han salido tres botes de los habituales de mermelada, por lo que he preparado una conserva para que me aguanten unos cuantos meses.
Si queréis otras recetas de mermelada pinchar abajo.
Mermelada de brevas sin azucar.
Mermelada de ciruela, naranja y cardamomo.
Cómo preparar la mermelada de higos:
Como podéis ver he preparado la mermelada sin pelar los higos, ya que estos tenían la piel muy fina, por lo que he tenido que triturar una vez blandos.
Lavar los higos y quitar el rabito de arriba.
Partir en trozos.
Echar en la cacerola junto con el azúcar y el zumo de limón.
Poner al fuego y cuando empiecen a cocer bajar el fuego al mínimo.
Dejar cocer hasta que estén blandos y casi deshechos, unos 20 minutos.
Triturar, si tienen piel.
Si no tienen piel no es necesario triturar ya que se deshacen.
Volver a poner a fuego mínimo 10 minutos más.
Para hacer la conserva:
Cocer en abundante agua los frascos y las tapaderas 15 minutos.
Escurrir y dejar secar al aire, nunca secar con un trapo.
Llenar los frascos con la mermelada aún caliente, cerrar bien y ponerlos boca abajo para hacer el vacío, dejar varias horas hasta que enfríen bien.
Después conservar en lugar oscuro y seco.
A mí me gusta consumirlos en tres o cuatro meses, aunque pueden durar más.
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