Un concepto que me parece muy interesante es el de “Back to Mac”: si devuelves a Mac seis envases vacíos podrás optar a un labial gratis. Pero atención, Mac no acepta cualquier producto de su marca dentro de las condiciones de “Back to Mac”. Por ejemplo creo que la colección de Viva Glam no entra dentro de las mismas. Y también resulta que no todos los países conocen esta promoción, ya que sin ir más lejos en Holanda, donde yo vivo, me han dicho en el stand de Mac que en todo caso tendré que guardarme los productos vacíos para canjearlos en otro país europeo, porque aquí nanay de la China. Lástima. Pero yo de momento ya tengo 3 productos aguardando, así que todo se andará.
Nunca me había fijado hasta hacer estas fotos, pero vistos uno junto al otro estos tres tonos parecen prácticamente iguales. Nada más lejos de la realidad, ya que en los labios son muy diferentes.
El Brave fue el primero que me compré. Como se aprecia en las fotos ya está bastante trallado. Yo sabía que había una serie de labiales de Mac muy famosos en la blogosfera, pero buscaba algo muy concreto, tipo “my lip but better”, cubriente pero a la vez cremoso, de un color parecido a mis labios y no demasiado brillante. Así me encontré con el Brave y surgió el flechazo. Es el nº A72 de la serie Satin, y pasa totalmente desapercibido en reviews y hauls, pero ha sido desde el primer momento uno de mis favoritos.
Después del Brave vino el Angel, y este sí sabía ya que era famoso con nombres y apellidos. Ya había estado usando un frost de Catrice que me gustaba cómo quedaba en verano pero que no me aguantaba nada en los labios, así que cayó el Angel, que era muy parecido pero aguantando mucho más puesto. El Angel es el nº A72 de la serie Frost.
Y el tercero ha sido el Patisserie, que también lo compré sabiendo que es uno de los grandes favoritos de las amantes de Mac. Este ha caido de rebote, la verdad que no estaba pensando en comprar ningún labial últimamente y menos de un tono nude, que ya tengo cientos. Yo creo que mi subconsciente me animó a comprarlo más bien por el nombre: Patisserie y encima con olor a natillas… ¡Quién podrá resistirse! Pero la verdad es que no veo qué tiene tan especial este tono. Es bonito, en su línea brillito nude, pero nada más. El Patisserie es el nº A54 de la gama Lustre.
En fin, de momento no creo que vayan a caer más labiales de Mac, sobre todo teniendo en cuenta dos motivos, el primero su precio, que ronda los 20 euros, y el segundo porque, muy en mi línea, querría probar el Bombshell o el Creme de la Femme, que según creo son bastante parecidos a los que ya tengo. Aunque, todo se andará… sobre todo si me vuelve a embriagar ese perfume a natillas.
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