Hablan de cuando se juntan el hambre y las ganas de comer, pero habitualmente la desesperación por llevarse algo dulce a la boca viene acompañado por no tener nada en casa, y aderezado por una suerte de tiendas cerradas, horas intempestivas y días de fiesta. Entonces acude a nuestra mente UhmmmCookies! y los mugcakes de emergencia.
Los mugcakes son la Guardia Nacional de los dulces, porque siempre aparecen en caso de catástrofe o necesidad extrema, actúan rápido y raro es que no dispongamos de los ingredientes necesarios en casa para elaborar uno.
Nuestro mugcake de emergencia de hoy es una pequeña delicatessen de mantequilla de cacahuete con chocolate negro y azúcar moreno que te hará cerrar los ojos de placer, pensando en que esa mezcla dulce/salada que se está fundiendo lentamente en tu paladar apenas ha tardado 5 minutos en elaborarse. Por eso nos tomamos la libertad de escribir una introducción tan Quijotesca, porque -francamente- la receta no da para más y nuestros redactores prefieren hurgarse los oídos con un palo y comerse un plátano.
INGREDIENTES (para una intensa sesión de gastroporno amateur)
30 gr. de mantequilla sin sal
30 gr. de chocolate negro para fundir
1 huevo
Una cucharadita y media de mantequilla de cacahuete o crema de cacahuete
Una cucharadita y media de levadura química tipo "Royal"
5 cucharadas soperas rasas de harina
2 cucharadas soperas rasas de azúcar moreno
Y para decorar, ralladura de chocolate/sprinkels/pepitas y otra cucharadita y media de mantequilla o crema de cacahuete
PREPARACIÓN
Podríamos enrollarnos, pero la receta es corta y a juzgar por vuestro pulso tembloroso, tenéis más necesidad de azúcar que Hulk de unos pantalones elásticos, de forma que comenzamos fundiendo la mantequilla con el chocolate en el microondas durante unos 40 segundos a máxima potencia (~800w).
Obviamente, el "mug" de "mugcake", significa "taza" en inglés, de forma que mezclaremos los ingredientes directamente en una.
El calor de la mantequilla comenzará a derretir el chocolate, y nosotros ayudaremos moviéndolo bien hasta que se haya fundido completamente.
Añadimos el resto de ingredientes y movemos, a ser posible con unas varillas, hasta que la mezcla no contemple ni un sólo grumo. Ya sabéis que si dejáis uno solo, este año la Declaración de la Renta os saldrá a pagar.
Introducimos el mugcake en el microondas durante unos 40 segundos y cuando comience a subir añadimos en el centro la mantequilla de cacahuete que reservamos para decorar y lo metemos por última vez en el microondas durante otros 40 segundos.
Y voilá, sólo tendréis que distribuir la ralladura, sprinkles o pepitas de chocolate por toda la superficie y que recoger los restos de mugcake que habrán quedado esparcidos por todo el plato del microondas, porque sed realistas, es tan inevitable que desborde y se salga de la taza como que te aparezca una ralladura en la pantalla de un teléfono de 700eur.
Es súper, súper, súper, suuuuuuuuuuuuuuuúper importante que jamás os paséis en el tiempo. Es necesario que quede cremoso en el centro y en el fondo, quedando la parte superior más "abizcochada". Si no tenéis cálculo, quedaos cortos. Nunca debe quedarse seco o no se lo podría comer ni la llama que iba al dentista en Barrio Sésamo.
Hale, ya podéis soltar el pulgar al señor de la hiperglucemia. De nada.