Ha pasado el verano y volvemos con el reto del alfabeto dulce. Una de esas actividades mensuales que tanto nos gusta a los reposteros! ya llevamos un tiempo y andamos en la recta final. Nos estamos quedando sin alfabeto!!!!! así que las letras empiezan a escasear y los ingredientes empiezan a ser difíciles.
Este mes inauguramos la temporada del alfabeto con la J y qué ingrediente nos ha tocado! Jengibre!! yo quería huir de las galletas de jengibre típicas en navidad porque fueron una de las recetas que intenté hacer al principio del blog y la primera que me salió mal, así que la tengo pelin de respeto.
Navegando por la red y los blogs de amigos y compis, descubrí una receta maravillosa de pavlova con sirope de jengibre e higos en Bake-street y no me pude resistir. Le mandé un mensajito a la dueña de ese maravillosos blog, y la pedí permiso para usar su sirope.
Además aproveché para pedirle permiso a Ana de Cook the Cake para usar su receta de estos tremendos bizcochos de azúcar moreno que he tenido la ocasión de probar personalmente en su casa y que sabía que combinarían seguro. Y así salió esta Naked Cake tan bonita!!!!
Vamos con la receta
Ingredientes
Para los bizcochos
320 gr. de mantequilla sin sal a temperatura ambiente
320 gr. de azúcar moreno
4 huevos talla L
320 gr. de harina
2 cucharaditas de bicarbonato sódico
1 cucharadita de canela
Una pizca de sal
1 cucharada de jengibre molido
Para el almibar de jengibre
75 g de jengibre fresco pelado y troceado
75 g de azúcar moreno
el zumo de 1/2 limón
240 g de agua
Para la crema de Higos
250 gr de mantequilla
250 gr de queso de untar
100 gr de azúcar glas
100 gr de mermelada de higos
Elaboración
Empezaremos preparando los bizcochos. Para ello, ponemos a batir la mantequilla con el azúcar moreno. mientras, en un bol aparte, mezclamos y tamizamos la harina con el bicarbonato, la sal, la canela y el jengibre molido.
Una vez que tengamos la mantequilla mezclada con el azúcar, empezamos a añadir los huevos uno a uno mientras seguimos batiendo, de forma que se cree una mezcla homogénea, si vemos que no se integra bien, podemos agregar un par de cucharadas de la mezcla de ingredientes secos para ligarlo todo.
A continuacíon, añadimos la mezcla de ingredientes secos en tres tandas, esperando a q ue esté todo bien mezclado antes de agregar más.
Ahora vamos con el horneado. En mi caso he repartido la mezcla en tres moldes de 18 cm de diámetro, pero podéis usar un único molde que sea alto, o un molde de 15 cm si os gustan los bizcochos bien altos. Mientras repartimos y preparamos la mas a en los moldes qu e previamente tenemos que engrasar con mantequilla y una pizca de harina, ponemos a precalentar el horno a 180 grados. Hornearemos durante 30 minutos aunque debemos vigilarlo ya que dependiendo del molde que usemos necesita más horneado.
Una vez tengamos los bizcochos, los sacamos del horno para que enfríen 10 minutos dentro de los moldes. Después los pasamos a una rejilla para que enfríen completamente.
Mientras tenemos los bizcochos enfriando vamos con el sirope de jengibre. Tengo que decir que me encantó, es un poco picante pero lo usaremos para empapar esos deliciosos bizcochos así que nos neutraliza un poco el picante y da un toque cálido que no sabremos de dónde viene!
Para preparar el sirope tenemos que pelar y trocear nuestro jengibre fresco. Lo ponemos en un cazo con el azúcar moreno, el agua y el zumo de limón a fuego medio hasta que hierva. Lo dejaremos a dicha temperatura 5 minutos a partir de que empieza a hervir y luego lo bajamos a fuego bajo hasta que reduzca la mitad del agua. Aproximadamente 20 minutos aunque como siempre digo, vigiladlo porque es difícil que todos pongamos el fuego igual de temperatura. Después lo retiramos y lo dejamos enfriar.
Bien! ahora que tenemos el sirope y los bizcochos preparados nos falta la crema y ya podremos empezar a decorar! la preparación es muy sencilla, sólo tenemos que poner la matequilla junto con el azúcar glas a batir y cuando esté integrado, agregamos el queso creo que debe estar frío. Por último, agregaremos la mermelada a cucharadas y muy lentamente, dejando que se integre la cucharada anterior con la mezcla antes de seguir. Esto es muy muy importante que lo tengáis en cuenta porque si echamos toda la mermelada de golpe se os puede cortar la mezcla y os tocará aplicar calor al baño maría para recuperarla, lo que es muy engorroso. Lo mejor es ir despacio.
Ahora que tenemos todo, refrigeramos la crema 10 minutos y mientras aprovechamos para colar el sirope y usarlo para rociar los bizcochos. Si habéis usado un único molde, deberéis cortar el bizcocho en capas antes de empezar a darle con el sirope.
Finalmente y para terminar la tarta, ponemos una capa de bizcocho y una capa de crema de higos de manera alterna. Lo decoramos todo con unos higos frescos
Pin It