Desde que estuve en Nueva York hace ya 3 años ando como loca buscando la receta original de la tarta de queso típica de allí. En uno de mis libros de cocina encontré esta, el cual la presenta como la New York Cheesecake aunque muy a mi pesar no es la que buscaba así que continuaré indagando hasta dar con una receta que me convenza al 100%. Mientras la encuentro, os dejo con esta que a pesar de no ser la que yo quería, no está nada mal. Es una tarta cuya textura queda muy suave al paladar y ademas con un sabor muy agradable.
Para un molde de 23-24 cm necesitamos:
900 g queso cremoso
300 g azúcar
3 huevos enteros + 2 yemas
30 g harina
1 cucharadita de extracto de vainilla
Ralladura de 1 limón y 1 naranja
300 ml nata (crema de leche)
420 g galletas tipo maría
15 g azúcar
120 g mantequilla en pomada
Trituramos las galletas, las mezclamos con la mantequilla derretida y 15 g de azúcar (una cucharada aproximadamente). Ponemos la mezcla en la base de nuestro molde y lo metemos al horno precalentado a 200º durante 10 minutos.
Una vez se haya horneado la base, bajamos la temperatura del horno a 180º. Ponemos en un bol el queso y lo batimos un poco, añadimos el azúcar, la harina y mezclamos bien y a continuación incorporamos la ralladura de limón, de naranja y la vainilla.
Cuando lo tengamos todo bien incorporado, agregamos los huevos y la nata (crema de leche). Mezclamos todo muy bien y disponemos sobre nuestro molde. Lo introducimos al horno durante 15 minutos. Cuando pase el tiempo, bajamos la temperatura a 100º y horneamos 30 minutos mas. Cuando haya terminado, apagamos el horno y dejamos la tarta dentro al menos 2 horas antes de guardarla en el frigorífico. Es conveniente prepararla de un día para otro para que los sabores se asienten.
Pasamos un cuchillo o puntilla por los laterales del molde para despegar la tarta antes de desmoldarla y listo.
Espero que os guste, gracias por leerme y Bon Appetit :)
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