Cómo os comentaba en la anterior publicación, acabamos el mes con los retos habituales, a los que sí que he conseguido llegar. Hoy le toca el turno a Bake the world.
Este mes, las chicas nos proponían viajar hasta Francia, en concreto a Normandía y probar su pan Brié: un pan de masa densa y corteza dura, que puede recordarnos a nuestro pan candeal.
En casa hemos gastado este pan en los desayunos, tostadito...los normandos suelen tomarlo con langostinos o mantequilla.
Me he guiado por las recetas de Un pedazo de pan y Los manjares de Ana María, con las cantidades de la receta de Richard Bertinet.
Ingredientes para el prefermento:
500 g de harina de fuerza
350 g de agua
10 g de levadura fresca
10 g de sal
Ingredientes para la masa:
250 g de ha rina de fuerza
50 g de agua
50 g de mantequilla (temperatura ambiente)
10 g de levadrua fresca
5 g de sal
Cuando queramos hacer este pan, prepararemos el prefermento la noche anterior, ya que reposará en la nevera.
Deshacemos la levadura en el agua, ligeramente templada, y lo añadimos a la harina que tendremos mezclada con la sal.
Mezclamos bien con ayuda de una cuchara o de las manos. Cuando esté todo integrado, volcamos a la encimera y damos un pequeño amasado.
Dejamos en un bowl, tapado con film, durante dos horas, a temperatura ambiente y seguidamente pasamos a la nevera, donde reposará toda la noche (12-24h)
Antes de poder ponernos a terminar nuestro pan, deberemos dejarlo atemperar entre media hora y una, dependiendo de la temperatura que tengamos.
También sacaremos la mantequilla para que podamos trabajarla bien.
Comenzamos con la masa:
Troceamos nuestro prefermento y lo añadimos a la harina.
Echamos el resto de ingredientes, sal, agua con la levadura, y la mantequilla, que también trocearemos.
Mezclamos todos los ingredientes, hasta conseguir integrarlos; esta tarea nos costará un poco, ya que es una masa algo pesada. Podéis ayudaros de una rasqueta de panadero, una cuchara...pero finalmente habrá que amasar de forma tradicional.
Una vez integrados, dejaremos reposar la masa unos 10 minutos.
Amasamos y estiramos con ayuda de un rodillo. Doblamos y volvemos a estirar, así durante unos 10-15 minutos.
Es el momento de encender nuestro horno, para que vaya precalentado a 250º
Formamos una bola, o la enrollamos como si fuera un brazo de gitano. La dejamos reposar media hora (mejor tapada)
Dividimos nuestra masa en tres porciones y damos forma. También realizaremos el greñado, que en este caso es un corte central, dos paralelos más cortos y otros dos más.
Tapamos con dos o tres paños, y dejamos reposar durante unos 45 minutos.
Vaporizamos agua en el horno, para crear vapor e introducimos nuestros panes y volvemos a vaporizar.
Horneamos a 250º durante 5 minutos, bajamos el horno a 200º y dejamos 15-20 minutos más.
Sacamos y dejamos enfriar sobre una rejilla.
Lleva trabajo, pero si lo pensáis bien, hay muchos tiempos de reposo para descansar ;) Merece la pena prepararlo y poder disfrutar de un pan casero con un ligero toque de mantequilla. ¡IRRESISTIBLE!