Los ingredientes que he usado son: 1 huevo, 2 dl. de leche, 20 g. de levadura fresca, 50 g de azúcar, una pizca de sal, 250 g. de harina de trigo, 250 g. de harina de gofio.
Elaboración: Poner en un cazo la leche, templar la leche. Batir el huevo en una taza. Poner en una taza el azúcar y la levadura, mezclar y enseguida quedara liquida, de este modo se mezcla muy bien con la masa. Mezclar las dos harinas, ponerlas en un cuenco y al centro echar todos los ingredientes. Ir añadiendo harina al centro y amasar todo, si es necesario añadir unas cucharadas de harina más, hasta que la masa no se pegue a las manos. Poner la masa sobre la tabla y trabajarla bien, yo lo hago a mano, aunque el que tenga amasadora pues que la use, se amasa por al menos 10 minutos, levantándola y dejándola caer con fuerza sobre la tabla en modo que la masa coja aire y el pan sube más, dejar reposar la masa poniéndola en el cuenco cubierta por al menos 1 hora o hasta que la pasta haya doblado su volumen. Trabajar nuevamente la masa y darle forma redonda formando un pan o varios pequeños. Dejarla reposar nuevamente por 1 hora. Con un cuchillo afilado hacer dos cortes encima para dar forma al hornear. El pan se habrá puesto en una placa con papel de horno. Cocer en horno precalentado a 200° por unos 30 minutos, según el horno ir vigilando.