Seguramente todos conocen bien el famoso Pan de Muerto. Es una receta muy típica de la pastelería mexicana, fuertemente asociada a la celebración del Día de Muertos. Hoy les comparto todo lo que necesitan saber para hacer esta receta casera y algunos datos lindos a tener en cuenta.
Tabla de contenidos
Sobre el pan de muerto
Historia de la receta de pan de muerto
Cómo es su nombre ¿pan de muerto o de pan de mariposas?
Significados detrás de la receta de pan de muerto
¿Cómo se come el pan de muerto?
Tipos de pan de muerto para cada gusto
Receta original de pan de muerto
Ingredientes
Como hacer pan de muerto
Armado y decoración del pan de muerto
Sobre el pan de muerto
Historia de la receta de pan de muerto
Como todas las recetas, tiene sus historias, leyendas y lugares de origen. Pero ésta en particular tiene un origen cuanto menos interesante y antiguo. Más allá de todo lo documentado, lo cierto es que esta receta fue registrada por primera vez recién en el año 1938 por la cocinera mexicana Josefina Velazquez de León en su recopilación de recetas ¨Repostería selecta¨.De ahí se empezó a impartir culturalmente por todo México.
Cómo es su nombre ¿pan de muerto o de pan de mariposas?
Según los historiadores mexicanos, esta receta se hacía antes de la conquista Española y era como un pan de amaranto, maíz tostado y miel. Se llamaba pan de mariposa porque tenía una mariposa marcada en la masa y se ofrecía a la diosa Cihuapipiltin.Las crónicas españolas refieren que al llegar los conquistadores a la zona, vieron que este mismo pan contenía la sangre de víctimas sacrificadas.
Otra versión dice que en las ceremonias de agradecimiento a los dioses se hacían sacrificios humanos y que en realidad lo que comía el chamán era el corazón de la víctima aún latiendo.
Los españoles al ver esto expresaron su rechazo y para congraciarse con ellos se empezó a hornear este pan con determinados símbolos en forma de reemplazo.
Significados detrás de la receta de pan de muerto
Su presencia es muy importante en las festividades del Día de Muertos en México. Por eso, el pan de muerto se fue llenando de significados en su estructura.Las partes con forma de huesos haciendo referencias a las extremidades humanas, el centro en la parte superior simbolizando el cráneo, las lágrimas laterales recuerdan a los fallecidos y la forma redondeada representa el ciclo de la vida y la muerte.
Algunas veces es común encontrarlo rebozado o espolvoreado con azúcar rojo como símbolo de sangre o directamente se hornean con forma de esqueleto. Recordemos que son un símbolo muy representativo del Día de Muertos.
¿Cómo se come el pan de muerto?
La receta de pan de muerto siempre debe tener azahar y esencia de naranja. Se tiene la creencia que este aroma es una de las señales que reconocen los difuntos para acercarse, además de la luz de las velas. Por esto es que este pan se come junto a la tumba o en los altares de las casas. La intención es compartir el momento con los difuntos, honrarlos y rendir culto.También en esta misma ceremonia es infaltable la decoración alusiva, las velas, flores y otro tipo de bollos y delicias.
Tipos de pan de muerto para cada gusto
Actualmente existen muchos tipos de pan de muerto en México. Desde principios de octubre hasta pasado el Día de Muertos se pueden encontrar en muchos puntos de la ciudad y por donde se te ocurra, e incluso en algunos hogares se comen meses antes.Es importante recalcar que más allá de la amplia variedad siempre la base debe ser una masa tipo brioche. Fuera de ese detalle, se puede encontrar de diferentes tamaños, formas, colores y texturas. Incluso también con diferentes rellenos como cajeta, chocolate, queso, zarzamoras, crema pastelera y todo lo que la imaginación y paladar requiera.
Receta original de pan de muerto
Rinde: 10 porciones
Tiempo de elaboración: 4 horas.
Ingredientes
550 gr de harina de fuerza.
200 gr de azúcar blanca.
100 gr de mantequilla a temperatura ambiente.
1 cucharadita de agua de azahar.
25 gr de levadura fresca.
2 huevos medianos.
190 ml de leche entera.
1 naranja (solo la ralladura).
1 cucharadita de sal fina (4 grs aprox).
Azúcar y mantequilla extra para la decoración.
Como hacer pan de muerto
Etapa de esponja o fermento:Mezclar en un bol o taza 50 ml de leche tibia y toda la levadura fresca. Disolver bien hasta integrar. Luego a esta mezcla añadir 2 cucharadas de harina y 2 cucharadas de azúcar. Dejar reposar aproximadamente unos 25/30 minutos.
En una mesa o mesada bien limpia volcar el resto de la harina y hacer un hueco en el centro y ahí colocar los huevos. Integrar la harina y los huevos hasta lograr una especie de masa.
Logrado, comenzar a añadir la mantequilla desmenuzando con las manos e integrar con paciencia a la masa.
Con la manteca integrada, hacer un hueco en el centro de la masa y añadir ahí el agua de azahar, la cucharadita de sal, la ralladura de naranja y el resto del azúcar.
Amasar hasta lograr una masa integrada. Esto llevará aproximadamente 5 minutos.
Mezclar la masa y la leche tibia gradualmente, amasando hasta que se logre una consistencia no pegajosa.
Descansar y amasar la masa intercalando periodos hasta lograr una consistencia lisa. Agregar la esponja fermentada.
Hacer un bollo y dejar reposar en un recipiente aceitado y tapado con papel film en un lugar cálido durante 1-2 horas hasta que duplique su volumen.
(Trabajar la masa sobre una superficie enharinada).
Armado y decoración del pan de muerto
Pasado el tiempo dividir la masa y armar 7 panecillos de 80 gr y 7 de 60 gr. Trabajarlos con el centro de la mano ahuecada para que queden lisos y redondos.
Colocar los bollitos en una bandeja para horno previamente enmantecada, dejando espacio de 2 o 3 cm entre ellos.
Tomar las bolitas más pequeñas y usarlas para la decoración. Formar los huesos, las lágrimas laterales y la bolita para poner en el centro de la parte superior de cada pan. Ver fotos en la receta para orientarse.
Precalentar el horno a 180 grados y hornear durante 15 minutos.
Cuando estén dorados, retirar del horno y poner en una rejilla para enfriar.
Pincelar los panes con mantequilla derretida mientras aún están calientes para darles brillo.
Espolvorear con azúcar mientras se pincelan los panes.
Están listos para comer calientes o fríos.