Veréis hace unos días, una chica me pedía en el face una receta de pan de leche, y cuando vine a buscar la receta para mandarle el enlace me dí cuenta que no la había metido, y no es que no la haga (ya que es uno de los clásicos en casa) sino que son de esas recetas que como son tan habituales piensas que ya está y sin embargo brilla por su ausencia, así que aquí os dejo la receta. Solo me queda decir que es muy sencilla y quedan unos bollitos tremendamente tiernos.
NECESITAMOS LOS SIGUIENTES INGREDIENTES:
250 gr de leche
500 gr de harina panadera
70 gr de azúcar
10 gr de sal
3 cucharadas de aceite de oliva suave.
12,5 gr de levadura (la mitad de un taco)
Para pincelar un chorro de leche
ASÍ DE FÁCIL LOS PREPARAMOS:
Ponemos en un bol la harina y hacemos un agujero en el centro y allí echamos el azúcar, la sal, el aceite y casi toda la leche (dejamos una poca por si no la necesitamos) y comenzamos a integrar los ingredientes allí (me resulta más fácil hacerlo así que no sobre la mesa) una vez que tengamos todo mas o menos integrado lo volcamos sobre la mesa de trabajo y comenzamos a amasar ( si vemos que nos hace falta le añadimos la leche que habíamos dejado)
Al principio pegará, pero una vez que esté cogiendo cuerpo se amasa perfectamente. Podemos dejar reposar un poco, eso nos facilitará el amasado. No queda una masa demasiado pegajosa, se trabaja bien. Podemos amasar con robot, pero es muy sencilla y para quienes nos gusta toquetear las masas es todo un placer.
Continuamos amasando hasta que tengamos una masa muy elástica, como dije antes , podemos ir haciendo amasados cortos y reposos.
Una vez que tengamos una masa lisa, la estiramos un poco con las manos y le añadimos la levadura desmenuzada, mojamos las manos con un poco de agua para que se hidrate y amasamos hasta integrar bien. En este punto parecerá que hemos tirado por la borda todo el trabajo que habíamos hecho antes, pero en unos segundos la masa habrá absorbido toda la humedad y la levadura estará integrada.
Untamos el bol con un poco de aceite, tapamos con papel film y dejamos levar hasta que doble el volumen.
Una vez que estén listos los panecillos echamos un pizco (muy poca, lo justo para que no pegue) de harina sobre la masa y cortaremos las piezas, las hice de unos 70/75 gr y me salieron 12. y formamos unas bolitas, tapamos con un paño y dejamos 10 minutos.
Ahora formamos los panes arrastrando las bolitas como si fuera un rodillo y ponemos sobre la bandeja de horno forrada con papel film, dejando espacio entre ellos ya que crecen bastante. Una vez que tengamos todos con una cuchilla o un cuchillo bien afilado le hacemos unos cortes , tapamos y dejamos hasta que doblen su volumen (me tardaron 1 hora y media) pero depende de la temperatura que tengamos.
Una vez que hayan doblado pincelamos con leche (también se puede con huevo) e introducimos en el horno previamente caliente a 190º durante unos 15 minutos, hasta que estén doraditos.
Dejamos enfriar sobre una rejilla y a disfrutar.
Quedan unos panecillos muy tiernos ideales para la merienda de los más peques.
Con vuestr@ permiso la entrada de hoy se la quiero dedicar a mi amiga Beatriz Lustres , ya que fue ella la que me pidió la receta y para que se anime a hacerlos que son muy faciles.