Cuando se puso de moda la tarta de obleas, no llegué a hacerla. Era tan fácil y tenía tan buena pinta... pero resulta que probé una que hizo alguien y no me gustó, las obleas estaban blandas y yo me había hecho una idea que no coincidía con esa tarta. No es que estuviera mala, sino que no era lo que yo me esperaba. Así que la olvidé a pesar de verla una y otra vez por internet.
Pero esta tarta que traigo hoy es absolutamente deliciosa, las galletas de helado se mantienen crujientes y el chocolate, al llevar manteca de cerdo está cremoso.
Es muy fácil de preparar y os aseguro que tiene un sabor increible. Creo que por internet circula como "tarta huesitos" por el parecido en el sabor con estas chocolatinas.
No pongo la fuente de donde he sacado la receta, porque en realidad he seguido la receta del turrón de chocolate solo que con las galletas.
No es una tarta tradicional, pero con ella vamos a celebrar hoy, por adelantado, el cumpleaños de mi hijo pequeño, que cumple ya, madre mía, diecinueve años.
INGREDIENTES:
2 tabletas de chocolate con leche.(unos 300 gr)
1 tableta de chocolate negro (unos 200 gr)
2 paquetes de galletas de helado (en realidad del segundo paquete os sobrará mucho)
95 gr de manteca de cerdo.
PREPARACIÓN:
Primero trituramos los dos chocolates, 15 segundos a velocidad 8.
Añadimos la manteca de cerdo y derretimos cinco minutos, 50º, velocidad 2. Si al acabar no lo veis bien fundido, poned un par de minutos más.
Ahora vamos a montar el pastel, en un molde de plum cake, yo he usado uno desechable de aluminio, echamos un poco de chocolate y dejamos que se extienda por todo el fondo.
Colocamos encima las galletas de helado hasta ocupar todo el fondo. Si es necesario cortáis las galletas para rellenar los bordes y que no se queden huecos.
Volvemos a echar una capa fina de chocolate y con cuidado y una espátula la extendemos para que cubra las galletas.
Volvemos a repetir esta operación hasta acabar el chocolate que debe cubrir todo el molde, incluido los laterales que se van quedando huecos.
Dejamos enfriar a temperatura ambiente un par de horas y listo.
Vamos a triturar los chocolates. Yo he puesto más de chocolate con leche porque así queda más suave. Pero podéis poner solo negro.
Añadimos la manteca y fundimos.
Y vamos a montar el pastel. Este es el molde que usé y las galletas de helado de la marca hacendado que son algo más grandes.
Primero cubrimos el fondo con una capa de chocolate no muy gruesa.
Y vamos colocando las galletas encima.
Volvemos a cubrir con una capa fina de chocolate. Si os fijáis veréis que al final se pone una galleta cortada para cubrir los huecos. Vamos a repetir esta operación hasta que se nos acabe el chocolate.
Tenemos que acabar con una capa de chocolate, así que calculad bien. A mi me quedó un hueco en el lateral del molde. Dejamos enfriar a temperatura ambiente.
Y mirad que corte más rico.
¿Veis la esquina? es el hueco en el lateral que no cubrí de chocolate. Hace como un escalón, pero no desmerece para nada el pastel.
El sabor del chocolate con la galleta crujiente hace de este pastel una maravilla.
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Fuente: este post proviene de Tapitas y postres, donde puedes consultar el contenido original.
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