La receta es súper fácil y además no necesitamos horno para su preparación. Sale un postre fresco, cremoso y muy rico.
2 latitas pequeñas de piña en su jugo(454 gr)
400 ml de nata (crema de leche)
6 láminas de gelatina neutra
60 gr de azúcar(opcional)
1 paquete de bizcochos de soletilla
Caramelo líquido
Yo he utilizado un molde rectangular de
Y lo he forrado con un papel ya cortado para moldes rectangulares. Pero lo podéis forrar con papel film.
Hidratamos la gelatina en agua fría.
Mezclamos la nata (crema de leche) con el jugo de piña que contiene las latas y el azúcar (yo se la he puesto, pero eso es al gusto).
Removemos y calentamos (hasta que esté caliente pero no hierva).
Escurrimos la gelatina y la disolvemos en la mezcla anterior.
Untamos el molde con caramelo líquido.
Colocamos unas rodajas de piña en la base del molde.
Cubrimos con una capa de bizcochos.
Empapamos con la mezcla líquida que preparamos antes. Colocamos otro piso de bizcochos y regamos con la mezcla de nuevo.
Repetimos hasta completar el molde, acabando siempre por empapar bien los bizcochos.
Enfriamos en el frigo durante 6 horas.
Se desmolda muy fácilmente al utilizar el papel. Yo le he puesto unas cerezas confitadas y unas hojas de menta para adornarlo.
Anímate a prepararlo está riquísimo!!!!