Hoy para empezar el lunes con ganas os traigo otra tarta fresquita y fácil de hacer. Se trata de una tarta de piña y yogur. Queda riquísima y estupenda, aunque os recomiendo que la hagáis en un molde desmontable rectangular o de silicona. Yo la hice en un molde rígido tipo plum cake y no me ha quedado un desmoldado del todo limpio, al tener que usar film transparente para poder forrar el molde. Por lo que la idea es que uséis molde desmontable y le pongáis tira de acetato a los laterales y así facilitaréis mejor el desmoldado y que os quede una terminación más perfecta que la mía.
INGREDIENTES:
1 lata de piña en su jugo (no sobrarán algunas rodajas)
10 o 12 bizcochos de soletilla
7 hojas de gelatina neutra
500 ml. de nata (crema de leche) para montar
170 ml. de leche condensada
3 yogures de piña
50 ml. de leche
PREPARACIÓN:
Lo primero que haremos será preparar el molde, si es desmontable pondremos una base de papel vegetal, forramos el lateral con un tira de acetato o, en su defecto, con spray desmoldante. En caso de hacerlo en un molde rígido, como el mío, usaremos dos trozos de film transparente para forrar el molde, uno para el lado más ancho y otro para el estrecho, procurando que sobresalga el papel por todos los lados.
Sacamos las rodajas de piña y las cortamos por la mitad. El jugo sobrante lo ponemos en un bol y vamos bañando los bizcochos de soletilla en él. Forramos la base del molde con los bizcochos necesarios para que cubran la base. Y con las mitades de la piña las vamos poniendo en los laterales del molde hasta cubrir los dos laterales largos del molde. Reservamos en la nevera mientras preparamos el resto de la receta.
Ponemos a hidratar las hojas de gelatina en agua fría. Y cuando se hayan hidratado las escurrimos y añadimos a la leche (los 50 ml.) que habremos calentado previamente. Removemos hasta que se disuelva completamente y reservamos.
Montamos la nata (crema de leche) con la ayuda de unas varillas eléctricas, y cuando se haya montado añadimos la leche condesada y vamos integrando con una lengua de silicona, con movimientos envolventes para no bajar la mezcla. Añadimos los yogures y añadimos de la misma forma, y, por último añadimos el vasito de leche donde habíamos disuelto la gelatina, y añadimos e integramos de la misma forma.
Vertemos la mezcla en el molde, y la superficie la extendemos bien con una espátula. Encima ponemos otra tanda de bizcochos de soletilla bañados en el jugo de la piña y tapamos el molde. Refrigeramos un mínimo de 6 horas o de un día para otro.
Podéis introducirlo en el congelador media hora antes de desmoldar, es un truco para que sea más fácil hacerlo después.
Bueno, espero que os haya gustado esta nueva propuesta fresca y fácil.
Feliz lunes.
Fuente: este post proviene de Atrapada en mi cocina, donde puedes consultar el contenido original.
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