Tarta fría de piña
Dificultad: fácil Raciones: 8-10 Tiempo: 20 minutos más reposo
Ingredientes para un molde de 18-20 cm:
10-15 bizcochos de soletilla (receta aquí)
350 gr de piña en su jugo bien escurrida
El jugo de la piña
1/2 litro de nata (crema de leche) o crema de leche para montar
100 gr de azúcar
150 ml de zumo de piña
1 sobre de gelatina en polvo neutra, sabor a limón,… 85 gr
Rodajas de piña y cerezas en almíbar para decorar
Elaboración:
Empezamos mojando un poco los bizcochos de soletilla en el propio jugo de la piña, tienen que estar húmedos pero no muy empapados, y lo vamos colocando en la base del molde de la tarta; este tienen que ser desmoldable; de tal forma que cubran toda la base. Y guardamos en el frigorífico.
Por otra parte trituramos la piña, que tiene que estar bien escurrida hasta hacer un puré, queda bastante líquido. Y reservamos.
Ahora montamos la nata (crema de leche) que tiene que estar bien fría y cuando este semimontada le añadimos el azúcar y seguimos montando.
Colocamos el puré de piña en un bol y le añadimos un par de cucharadas de nata montada (crema de leche) y mezclamos bien, seguido vamos incorporando el resto de nata (crema de leche) hasta mezclar todo el conjunto. Echamos esta mezcla en el molde, encima de los bizcochos con precaución de dejar como 1 cm libre, sin llegar hasta arriba ya que es donde echaremos la gelatina de piña. Alisamos un poco la superficie y dejamos en el frigorífico para que vaya cuajando.
Mientras podemos hacer la gelatina de piña; calentamos el zumo de piña en un cazo al fuego y dejamos que hierva, entonces le añadimos la gelatina en polvo y mezclamos, apagamos el fuego y dejamos que se atempere un poco antes de echarla sobre la tarta fría de piña.
Cuando la gelatina este tibia la vertemos con mucho cuidado sobre la tarta, echamos la gelatina poco a poco y sobre el reverso de una cuchara para que vaya cayendo sobre la tarta.
Llevamos todo al frigorífico y dejamos como mínimo 4 horas para que cuaje, a mi me gusta dejarla de un día para otro.
Desmoldamos y decoramos al gusto y de forma clásica con el resto de piña y las cerezas en almíbar. Y ya la tenemos lista para comer.
Si queréis que os quede una tarta más firme tan solo tenéis que añadirle un sobre de gelatina al relleno, calentáis el puré de piña y le añadís la gelatina, cuando este todo frío ya podéis mezclarlo con la nata montada (crema de leche): y por lo demás todo igual.
Ya sabéis que si queréis ver todas mis novedades y noticias me tenéis que seguir a través de mi Facebook Cocineraymadre, además os animo a que participéis en mi grupo Cocinando con Rosa, cocineraymadre y preguntéis vuestras dudas o compartáis vuestras propias recetas y trucos de cocina.
También podéis verme en mi CANAL YOUTUBE, y si os gusta SUSCRIBIROS.
.