Un año que da para mucho y gastronomicamente hablando es dulce, salado, picante... Espero que 2015 sea mucho mejor, de hecho no se porqué pero los años impares son para mi mejores.
Bueno cambiando hoy por ser la última noche dicen que hay que ponerse algo rojo, pisar con el pie derecho en el suelo mientras comes la última uva, poner una maleta en la puerta y no se cuantas cosas más para atraer la suerte, los viajes, el amor,.. Yo como buena brujita hago muchas de ellas, puede que sean chorradas, peroo ¿y lo bien que lo pasamos? que parece que estamos jugando al twister.
Hoy traigo un pastel para esta noche muy bueno, muchos lo conocereis, el pastel inteligente pero yo le he vestido para la ocasión y cómo no es ROJO. Está bien rico y es una buena alternativa a los dulces navideños tradicionales.
INGREDIENTES (molde 20x20):
4 huevos
500 ml leche tibia
125 gr mantequilla derretida y fria
180 gr azúcar
115 gr harina
1 cta cacao en polvo puro
1 cda vainilla
1 cda emulsion red velvet (o colorante rojo)
PREPARACIÓN:
Separamos las yemas de las claras en cuencos aparte.
Mezclamos la leche con la vainilla y el colorante. Reservamos.
Batimos las yemas junto con el azúcar hasta que doble su volumen. Después incoporamos la mantequilla y mezclamos bien. Ahora añadimos la mezcla de leche y mezclamos bien. Por último la harina que hemos tamizado con el cacao.
Ahora es el momento de batir las claras a punto de nieve e incorporarlo a la mezcla con movimientos envolventes.
La masa es muy muy líquida, la vertemos en el molde previamente engrasado.
Introducimos en el horno precalentado a 180ºC durante 10 minutos, luego bajamos el calor a 160ºC y lo tenderemos unos 40 minutos más.
Pasado el tiempo sacamos del horno y dejamos enfriar totalmente antes de desmoldar. Si lo dejamos enfriar y ponemos una hora en nevera quedrá aún mejor.