En todas las provincias españolas hay un plato típico de patatas. Tanto es así que creo que podríamos recorrer toda España saltando de plato en plato, jajaja.
Las patatas a la burgalesa son muy parecidas a las patatas a la riojana. Como es lógico, cuando dos sitios están cercanos las costumbres son muy similares. Y eso se extiende a cualquier faceta de nuestra vida.
La diferencia entre estas patatas y las riojanas, es que en este plato se utiliza el puerro y el huevo cocido.
Añadir un huevo cocido a unas patatas guisadas les aporta un plus muy interesante. En color, en sabor y en textura, como se puede ver en estas patatas a la alcorina o en estas patatas de la casa.
De esta manera podemos disfrutar de un plato único y no tener que pensar en el segundo plato. A mi es que la posibilidad de preparar un solo plato por comida me parece muy tentadora y procuro preparar recetas que sean así.
La receta original que he seguido para preparar este plato podéis verla aquí.
INGREDIENTES (para 4 personas):
Patatas: 800 gramos.
Puerro: 250 gramos.
Ajo: un diente.
Tomate: 250 gramos.
Chorizo: 100 gramos.
Agua.
Huevo: 2.
Perejil picado: una cucharada.
Sal.
Aceite de oliva virgen extra.
Valores nutricionales (por ración):
Calorías: 416.
Hidratos de carbono: 38 gramos.
Grasas: 20 gramos.
Proteínas: 16 gramos.
Precio (por ración): 0,89.
ELABORACIÓN (tradicional):
Pelamos las patatas, las lavamos, las secamos y las cortamos en trozos chascándolas. Pelamos el puerro y lo picamos. Pelamos el tomate, lo troceamos y lo dejamos escurriendo en un colador. Retiramos la piel del chorizo y lo cortamos en rodajas.
En una cacerola calentamos un chorrito de aceite de oliva y sofreímos el puerro hasta que empiece a dorarse. En ese momento añadimos el diente de ajo (entero, con piel) y el tomate y rehogamos hasta que el jugo del tomate empiece a evaporarse. En ese momento añadimos las patatas y las rehogamos. Añadimos el chorizo, que también rehogaremos, el agua y la sal y cocinamos a fuego lento durante media hora, aproximadamente.
Mientras las patatas se guisan, cocemos los huevos.
Cuando las patatas estén hechas las servimos con los huevos cocidos picados y el perejil.
ELABORACIÓN (Crock-Pot):
Pelamos las patatas, las lavamos, las secamos y las cortamos en trozos chascándolas. Pelamos el puerro y lo picamos. Pelamos el tomate, lo troceamos y lo dejamos escurriendo en un colador. Retiramos la piel del chorizo y lo cortamos en rodajas.
En una cacerola calentamos un chorrito de aceite de oliva y sofreímos el puerro hasta que empiece a dorarse. En ese momento añadimos el diente de ajo (entero, con piel) y el tomate y rehogamos hasta que el jugo del tomate empiece a evaporarse. En ese momento añadimos las patatas y las rehogamos. Añadimos el chorizo, que también rehogaremos y pasamos todo a la olla lenta.
Cubrimos las patatas con agua, salamos y cocinamos durante 4 horas en temperatura alta.
Mientras las patatas se guisan, cocemos los huevos.
Cuando las patatas estén hechas las servimos con los huevos cocidos picados y el perejil.