Hace tiempo que tenía guardada esta receta de "Recetas de Chispi" y como acompañamiento del solomillo que os enseñe ayer me pareció ideal.
Ya sabéis que en esta casa nos gustan mucho las patatas: a lo pobre, las rojas de Jérica, asadas con tomillo... Y es que me cuesta concebir que exista un acompañamiento mejor.
INGREDIENTES (para 4 personas):
Patatas medianas: 5.
Orégano: 1/2 cucharada.
Pimienta negra molida: al gusto.
Sal en escamas.
Aceite de oliva virgen extra.
Pimentón dulce: 1 cucharadita.
ELABORACIÓN:
Ponemos agua a hervir en una cacerola.
Lavamos bien las patatas quitando cualquier resto de tierra, ya que vamos a cocerlas con piel.
Cocemos las patatas hasta que estén tiernas.
Dejamos que se enfrien.
Una vez frías, podemos pelarlas o conservar la piel, según como nos gusten más. Después las cortamos en gajos.
En una sartén calentamos un poco de aceite de oliva y echamos las patatas. Ponemos la pimienta y el orégano. Dejamos que se doren por un lado, les damos la vuelta y dejamos que se doren por el otro lado. Una vez doradas, añadimos el pimentóny removemos con cuidado de no romperlas.
Las sacamos de la sartén y las servimos espolvoreando sal en escamas.