Por fín parece que la primavera se ha instalado entre nosotros, me encanta esta época del año, en la que los días empiezan a hacerse mas largos y todo a nuestro alrededor se va transformando y llenado de vivos colores.
Y por supuesto, me encantan las fresas, siendo mi familia paterna de Huelva, no podía ser de otra manera, me gusta su forma, su color, su sabor, su olor... cuando empiezan a verse en los mercados, se me alegra el alma, es señal que el invierno toca su fín y se acerca la ansiada primavera.
En esta ocasión, he elegido éste molde especial para pies de Emiliy Henry, que compré el año pasado y que utilizo mucho para todo tipo de preparaciones, ya que al ser tan bonito, no hace falta desmoldar el contenido, va directamente del horno a la la mesa.
Aunque normalmente los pies se suelen hacer con la fruta cruda mezclada con azúcar y algo de maizena, a mi me gusta mas cocinar las fresas antes de ponerlas en la masa, para evitar el sabor a harina cruda que puede aportar la maizena si no se cocina bien.
Ingredientes:
2 Masas quebradas compradas (para 6 tartaletas)
800 g. Fresas
200 g. Azúcar (dependiendo del grado de acidez, se puede añadir un poco mas)
El zumo de 1 limón
1 Cucharita de maizena
100 ml. Agua
1 Palo de canela
1 Tarrina de creme fraiche
2 Cucharas de azúcar
Elaboración:
Lavamos las fresas, las secamos bien, las troceamos y las ponemos en una cazuela junto al azúcar y el palo de canela y lo dejamos cocer a fuego suave alrededor de un cuarto de hora o has que veamos que la fruta empieza de deshacerse.
Exprimimos el limón, le añadimos el agua y disolvemos en esto la maizena. Volcamos sobre la fresa, comprobamos la acidez por si hiciese falta un poco mas de azúcar y dejamos cocer un par de minutos hasta que espese. Retiramos del fuego y dejamos enfriar en la nevera. Reservamos.
Estiramos la masa adaptándola al molde elegido, rellenamos con la crema de fresa y cubrimos con la otra lámina, en este caso, he preferido cortala con un cortapasta en forma de estrella y las he ido pegando una a una, pero debo recocnocer que se me ha hecho un poco pesado y que el resultado no ha sido el que esperaba.
Pintamos con huevo y espolvoreamos azúcar y horneámos a 170º alrededor de media hora en horno previamente precalentado.
La he acompañado con creme fraiche a la que he añadido un poco de azúcar y he batido un poco para que se integrara bien, pero ésto es optativo. ¡Espero que os guste!